En una carta difundida a través de internet, Ricardo Anaya Cortés, candidato de la coalición por ‘México al Frente’, aseguró que la información difundida este martes que lo involucra en el delito de lavado de dinero “es un refrito de lo publicado y aclarado a cabalidad hace más de cinco meses”.
El aspirante presidencial afirmó que la empresa de su propiedad, Juni Serra que vendió una nave industrial “a precio de mercado”, es decir, en poco más de 54 millones de pesos, está declarada en su 3 de 3, “y siempre ha estado al corriente de sus obligaciones fiscales”.
La compraventa referida cumplió con todas las formalidades que la ley establece: A) Se realizó ante notario público. B) Se hicieron los avalúos correspondientes. C) El pago se efectuó a través del sistema bancario. D) Se pagaron todos los impuestos aplicables”, manifestó.
Anaya Cortés transcribió el fragmento principal del boletín de prensa emitido el pasado 18 de septiembre de 2017, sobre el particular, donde establece que Manhattan Master Plan Development del empresario queretano, Manuel Barreiro Castañeda cubrió el importe de la compraventa a entera satisfacción de la empresa de su propiedad.
No conozco de irregularidad alguna… En cualquier caso, a quien correspondería verificar que su empresa (Manhattan Master Plan Development) cumple con la normatividad vigente, es a las autoridades competentes, y no a quienes únicamente le vendimos un inmueble cuyo precio fue cubierto a nuestra entera satisfacción”, destacó.
El candidato del PAN, PRD y Movimiento Ciudadano indicó que, a quien corresponde verificar el origen legal de los recursos usados es a la autoridad competente, que es la única que tiene la obligación y la capacidad de hacerlo.
Tan es así, que en la propia escritura pública de compraventa se puede leer lo siguiente: ‘La parte compradora manifiesta, bajo protesta de decir verdad: a) Los recursos económicos que serán utilizados en la presente operación de compraventa tienen una naturaleza lícita’”, subrayó.
Sobre las supuestas amenazas en contra de los involucrados en el “entramado financiero” para beneficiarlo, Ricardo Anaya Cortés dijo que “es francamente absurdo y de risa loca afirmar que amenacé a personas que no conozco y con quienes jamás he tenido trato alguno, según el dicho de su propio abogado”.
Nuevamente el PRI recurre a la guerra sucia para tratar de confundir a la opinión pública e intentar levantar la campaña en ruinas de su candidato”, concluyó.