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Crónica del Poder

· La reforma que impulsa la diputada Yazmín Copete permitirá a los veracruzanos tener acceso a la prevención, diagnóstico o tratamiento de este tipo de padecimientos.

Tener un hijo que sufre una enfermedad rara o poco frecuente representa un martirio, una batalla dolorosa que la familia no puede ganar sola, inevitablemente se requiere el apoyo institucional, dijeron a la diputada Yazmín Copete Zapot los padres del pequeño César Blancas Fernández, quien a los pocos meses de nacido fue diagnosticado con fenilcetonuria.

César depende de una rigurosa dieta de por vida, que no le permite el consumo de gran parte de los alimentos “cotidianos”, como lo hacen otros niños. Es decir, no puede tomar leche, comer huevo, carne y muchos otros alimentos. Tan solo una lata de la fórmula láctea que consume cuesta tres mil pesos, a que hay que sumar estudios de laboratorio y medicamentos que debe tener de por vida.

César, es un pequeño guerrero, dijeron sus padres al externar su agradecimiento a la legisladora del PRD Yazmín Copete, por lograr el apoyo unánime del Congreso del Estado para aprobar la reforma a la Ley de Salud que obliga a crear el Registro de Enfermedades Raras y que el Estado otorgue tratamiento integral a los pacientes.

Solicitaron seguir trabajando en apoyo a estos pacientes y vigilar que realmente la Secretaría de Salud cumpla con establecer dicho registro e incorporarlo al sistema de información. Comentaron que se requieren, además, otras reformas para agilizar el paso de medicamentos por aduanas. En su caso les han retrasado la entrega de los mismos hasta por seis meses, por trámites burocrático que puede costar vidas.

Agregaron que es necesario concientizar al personal médico sobre este tipo de padecimientos, a fin de aliviar un poco la carga que la familia del enfermo lleva a cuestas. La madre del pequeño narró que en el caso de César, una doctora, de reconocido instituto, le quería suspender la leche recetada por los especialistas, con el argumento de que era muy cara y que el niño ya iba a cumplir dos años.

“Cuando me dijo eso me sentí desesperada y le expliqué que darle al niño una formula comercial significaría envenenarlo, a lo que respondió que no podía hacer otra cosa, entonces exigí que me firmara una responsiva y  me comuniqué de inmediato al Instituto Nacional de Pediatría, para preguntar riesgos, cuando ella escuchó, indignada me autorizó la receta; pero ese tipo de actitudes refleja negligencia, ignorancia o insensibilidad a este tipo de padecimientos”, contó.

Por su parte la diputada Copete Zapot agradeció la visita y las sugerencias de los padres del pequeño César, dado que ellos más que nadie han vivido en carne propia esta situación, al tener que tocar muchas puertas para recibir atención y apoyo institucional.

Agregó que la reforma que impulsa permitirá a los veracruzanos tener acceso a la prevención, diagnóstico o tratamiento de las enfermedades raras o poco frecuentes.
Y confió que el estado disponga de los medios materiales, humanos y económicos, necesarios para la implementación del registro y la atención adecuada.