Como dice la canción de Perales, ¿y quién es él? Bueno, pues se trata de un político que en su linaje lleva antecedentes perredistas, priistas y también panistas, últimamente se ha reputado como independiente. Heteróclito el hombre.
De acuerdo con su sitio web (www.armandoriospiter.mx), a los 30 años ya había logrado, académicamente hablando, un currículum impresionante que a otros, tal vez, les hubiera llevado toda una vida. Nació un 21 de febrero de 1973 –acaba de cumplir 45 años- en Técpan de Galeana, Gro. Se licenció en Derecho en la UNAM de 1993 a 1998 y, al mismo tiempo, en Economía en el ITAM. De 2000 a 2003 estudió la maestría en seguridad nacional en la Universidad de Georgetown de Washington y de 2002 a 2003 la maestría en administración pública en la Escuela de Gobierno John F. Kennedy, de las mejores en el mundo.
Últimamente, en su paso por el Senado de la República, junto a Miguel Barbosa y Zoé Robledo, Ríos Piter formaba una relevante “pinza” perredista que impulsaba acciones del partido desde esa tribuna legislativa. Digamos que eran unos liderazgos que llamaban la atención y de los cuales hoy carece el PRD no solo en el Senado, sino también en general.
Su paso por el ITAM le permitió codearse y hablarse paritariamente con gente de la talla de Pedro Aspe Armella, Luis Videgaray, José Antonio Meade, así como Ernesto Cordero. Muy tempranamente, el guerrerense fue asesor de José Ángel Gurría, en Hacienda. Gurría es hoy secretario general de la OCDE. Entre 1999 y 2000, fungió como subsecretario en la gubernatura de René Juárez Cisneros, en su natal Guerrero.
Entre 2003 y 2005 fue subsecretario de Política Sectorial en la Secretaría de la Reforma Agraria, bajo el mando de Florencio Salazar Adame. Dio su bandazo a la izquierda con Zeferino Torreblanca, entonces gobernador de Guerrero, quien lo nombró secretario de Desarrollo Rural estatal. Ahí se afilió al PRD, después de haber pasado por el PRI y el PAN. Ese “saltimbanquismo” vamos a pasarlo por alto, no hay políticos químicamente puros, y es muy probable que ¡todos!, lleven en su ADN alguna reminiscencia priista.

En 2009, el Jaguar resultó electo como diputado federal por el sol azteca y en 2012 llega a la Cámara Alta como senador. Es en ese lapso cuando intenta llegar a la gubernatura de Guerrero. Fue ahí cuando adopta el performance de la figura de un jaguar, imitando al felino doblando los dedos de una mano como una garra y gruñendo. Mmm, nunca me gustó está escenificación que estaba más bien como para un luchador enmascarado, pero bueno…
Controvertido. En 2011 no tuvo el menor empacho de apoyar al ex priista Ángel Heladio, que ganó la elección por la gubernatura. En 2014, tras la infausta noche del 26 de septiembre en Iguala (fueron secuestrados 43 estudiantes de la Normal de Ayotzinapa) deja la militancia y se asume independiente. Esto después de embroncarse con el grupo de los Chuchos que, según él, le sugirieron negociar su candidatura al gobierno de Guerrero con el desprestigiado de Ángel Aguirre, cosa que tanto Jesús Ortega como Jesús Zambrano han negado, pero vaya usted a saber. Pero no lo dudo, algunos políticos son muy dados a amafiarse. En 2017 empieza a trabajar para la grande por la vía independiente, generando simpatías, entre ellas la de ex Canciller Jorge Castañeda.
Hasta ahí la trayectoria de este gallo que se quedó en polluelo. Lo demás ya lo sabemos. No pudo renunciar a la tentación de las trampas. Su pretendida candidatura independiente resultó un fiasco que lo ha asumido en el total desprestigio. En lo personal, no me desagradaba el tipo, lo veía como una real alternativa. ¡Qué decepcionante papel!
gama_300@nullhotmail.com @marcogonzalezga