«Bestriz Gutiérrez Mueller no deja de sonreír. Parece hipnotizar a más de uno aariba y abajo en el estrado. Lanza mmiradas coquetas a su esposo y con cada movimiento de cabeza, con cada gesto, con cada moviminto de mano, marca los ritmos y los estados de ánimo en el discurso de su pareja. La esposa de AMLO se perfila como el nuevo empuje en esta etapa del tabasqueño rumbo a la presidencia. Los simpatizantes de éste la apapachan, le lanzan consignas de apoyo. Beatriz sólo sonríe y se deja querer». Lo comentó Rivelino Rueda en «El Financiero».