Hoy 18 de abril, los asambleístas eligen a los miembros del Consejo de Estado en Cuba. Es condición para ocupar la Presidencia ser miembro de esa estructura del poder político. Uno de ellos será el próximo presidente.

El pasado 11 de marzo, en su peculiar sistema de votación, casi 7 millones de cubanos, de un padrón de 8 millones, eligieron a los 605 integrantes de la Asamblea Nacional del Poder Popular.

El hijo primogénito de Raúl Castro (86), el coronel Alejandro Castro Espín, jefe de la Inteligencia y la Contrainteligencia cubana, no quedó en esa estructura. Antes de la integración de la misma se le pensaba como uno de los posibles sucesores de su padre.

Desde el triunfo de la Revolución, en enero de 1959, hasta este 19 de abril, casi 60 años, la presidencia sólo la han ejercido Fidel Castro (1959-2008) y luego su hermano Raúl (2008-2018). Mañana otro será el presidente.

El vicepresidente primero del actual Consejo de Estado, Miguel Mario Díaz-Canel Bermúdez (57), quien ocupa ese cargo desde el 2013, se ve como el evidente sucesor del actual presidente. En el 2009 asumió el cargo de ministro de Educación Superior y en el 2012 el de vicepresidente del Consejo de Ministros.

Es ingeniero en electrónica y se incorporó por algunos años al Ejército, pero después ingresó como profesor al mundo de la universidad. Desde muy joven ocupó altas responsabilidades en el Partido Comunista de Cuba.

Se le ve como cabeza de una generación de dirigentes, a los cuales no les tocó participar en la Revolución, que se han distinguido por su capacidad de gestión, lealtad y también obediencia a los Castro.

Los cubanólogos coinciden en señalar que habrá algunas novedades en la gestión del proyecto, pero ningún cambio de fondo. Se habla de modificaciones en el sistema político y también de transformaciones menores en la economía.

El nuevo presidente asume el cargo en medio de una coyuntura adversa por la crisis venezolana que a Cuba le ha reducido a la mitad la entrega de petróleo subvencionado, la caída de la entrada de divisas por los servicios que antes se le vendían a Venezuela y las tensas relaciones con el presidente Trump.

Ahora, por ley en Cuba sólo se puede gobernar dos mandatos, cada uno de cinco años, para sumar 10 años, pero no más. En ese caso Díaz-Canel podría estar en la presidencia del 2018 al 2028. De ser el caso dejaría el cargo a los 67 años.

Hasta el 2021, Raúl Castro seguirá siendo el primer secretario del Partido Comunista de Cuba. Desde ahí va a vigilar la gestión del nuevo presidente. Su presencia es clave para resolver tensiones y garantizar una transferencia del mando de manera ordenada.

Twitter: @RubenAguilar