Ricardo Anaya, candidato presidencial de la coalición Por México al Frente, insistió en que al ser el único contendiente con posibilidad de ganar a Andrés Manuel López Obrador, es necesario que ambos debatan su respectivo proyecto de nación.
En su conferencia de prensa matutina, el queratano se dijo fortalecido por el resultado del debate del domingo pasado y comprometido a redoblar su esfuerzo, con objeto de remontar la diferencia en las percepciones, que hoy lo separan del tabasqueño.
“Sería conveniente un debate en donde pudiéramos participan él y yo, cara a cara, de frente al país, en donde quede claro qué es lo que representan cada una de las candidaturas y que, de esa manera, la gente pueda tomar una decisión informada el primero de julio”.
La evidencia de que Anaya confrontará su proyecto con el de López Obrador y demostrar las debilidades que éste tiene frente al electorado, otorgan al candidato de la coalición Por México al Frente, una postura triunfalista que pretende prolongar en los próximos dos meses. Para el abanderado del PAN no existen ya ningunos de los tres aspirantes restantes (José Antonio Meade, Margarita Zavala y Jaime Rodríguez).
En su exposición mañanera dio a conocer su plan de siete puntos para enfrentar la inseguridad. Estas ideas pretenden mantener la estrategia iniciada por Felipe Calderón Hinojosa, al continuar usando al Ejército y a la Marina en actividades de seguridad pública.
Anaya matizó que eso ocurrirá mientras no haya una policía que dé certeza a la ciudadanía de seguridad.
También adujo que el retorno de las fuerzas federales a los cuarteles no es cuestión de plazos, sino circunstancias relativas a la modernización de las policías.