APENAS el próximo domingo, cuando comiencen oficialmente las campañas políticas con rumbo a la gubernatura del Estado, se comenzará a saber del movimiento político que hay en la entidad, porque hasta ahora, los candidatos a Diputados Federales y Senadores de la República, han transitado por la oscuridad, pues nadie ha hecho mucho uso de los medios de comunicación, con el pretexto de que no tienen dinero para promoverse, es decir, que su presupuesto no contempla precisamente que un aspirante pueda comprar publicidad política, porque, sencillamente, no le alcanzan los dineros autorizados y de su bolsa no quieren sacar nada, llegando, incluso, a pedir a todos los medios de comunicación, así como a sus representantes, con quienes tienen mayor contacto, que les hagan el favor de publicarles algunas de sus tareas partidistas.

Y todo mundo se pregunta, entonces, si no tienen dinero, para que se metieron de redentores del pueblo, sin tener, dicen algunos, la suficiente gasolina para trasladarse en sus vehículos a recorrer los pueblos y ciudades para conseguir el voto. Y es que, muchos de ellos, aún siendo de otros partidos políticos, quieren hacer lo que hacen los aspirantes de Morena, que se sientan, solamente, a esperar que lleguen las elecciones y ganar de calle, puesto que hasta ahora, ninguno de ellos se promueve ni da un solo paso a favor de su partido, de su candidato a la Presidencia de la República, y menos a favor de ellos mismos, porque sencillamente no tienen dinero, cuando en realidad, todo mundo lo sabe, es que sí hay dinero público que el propio INE, les ha otorgado para hacer sus respectivas campañas.

Pero, como ya no son tiempos de confiarse solamente, como los de Morena, en esperar sentados en un conocido café de la ciudad, si quieren ganar tienen que andar por todos lados y comunicar lo que hacen, porque de otra manera, no va a ser posible que la gente conozca su trabajo, pues las tareas de proselitismo se realizan más en los medios que directamente ante la ciudadanía, desde luego, por muchas razones, tales como el hecho de que a las reuniones convocadas por los candidatos, no van todos, además de que aún siendo sábado o domingo, que son días de descansar, el ciudadano los utiliza para sus propias actividades que no puede realizar durante la semana.

Y es que si no tienen dinero, difícilmente podrán trascender, además de que si lo tienen y se lo quedan, ya es otro problema que ahora suele ser recurrente, es decir, ya lo vimos en otras campañas políticas, donde no se invirtieron los recursos que se les otorgó y se los quedaron quienes aspiraban, incluso uno que otro, durante la campaña para la sucesión gubernamental, que de haberse aplicado dichos recursos, la historia podría, en estos momentos, ser otra, pero no, prefirieron guardarlo en la bolsa y comprobar ante la autoridad electoral, con algunas estrategias contables, haber utilizado correctamente los dineros, aunque bien se sabe que no se hizo, debido a los resultados y a quienes, de alguna manera, estuvieron cerca de quienes se encargaron de la administración de los recursos otorgados para la campaña política. De ahí que muchos insistan, todavía, en ser candidatos, porque saben que resulta ser un buen negocio, pues sabiendo que van a perder, prefieren no soltar el dinero, cuestión que se ha venido haciendo una costumbre bastante productiva para algunos candidatos.

De ahí que las campañas políticas que apenas comenzarán este fin de mes, serán las que produzcan ruido, porque los aspirantes a Diputados y Senadores, ni quien los oiga, ni quien los vea, porque han preferido mantenerse en el anonimato y que sean los candidatos a Gobernador, quienes les hagan campaña por ellos, cosa que debiera ser al revés, es decir, que los aspirantes a legisladores, fueron los que en este momento ya le tuvieran a su respectivo candidato a la gubernatura del Estado, un escenario político que les ayudará a lograr la victoria electoral.

Pero no, han esperado casi un mes para ponerse a trabajar, pues hasta ahora, nada se sabe de ellos, con la esperanza de que los candidatos a Gobernador, sean quienes los impulsen, es decir, que tranquilamente se colgarán de la popularidad del aspirante a Gobernador. Y esto sucede en todos los partidos políticos, porque ni uno ni los otros, se han preocupado por difundir sus actividades proselitistas y eso, en estos tiempos, es un irremediable paso hacia la derrota política.

Pero, insistimos, basta con remitirse a un caso bien especial de las pasadas campañas gubernamentales, para que se den cuenta que sin dinero, no podrán ganar, así sean tan populares como piensen. Si no fuera así y el dinero no hiciera falta para estos trabajos, las propias autoridades electorales, no les otorgarían tantos millones de pesos, que viéndolo bien, no son suyos, sino del mismo pueblo que les paga sus aspiraciones a través de las famosas prerrogativas a partidos políticos y directamente a candidatos.

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Y TAL VEZ, EL SEGUNDO debate presidencial, sea mejor y que haya oportunidad de que los ciudadanos conozcan bien a sus candidatos a la Presidencia de la República, porque el encuentro del domingo, no dejó satisfechos a algunos, salvo a quienes son seguidores de cada uno de los aspirantes, tal y como sucedió en un programa televisivo, trasmitido por Televisa, al final del debate, donde los invitados no tuvieron empacho, desde el inicio, de manifestar sus preferencias electorales, por lo que ninguno de ellos, fue confiable para la audiencia en eso de analizar el encuentro político y dar una postura, respecto del mismo, de manera imparcial.

Así es que se espera que el otro debate que tenga lugar, al parecer, el veinte de mayo, sea más definitorio por cuanto corresponde a ofrecer a los ciudadanos y televidentes en general, una perspectiva más clara de los perfiles de cada aspirante presidencial, porque por ahora, lo que también mucho se esperaba es que hubiera sangre por todos lados, producto de los golpes políticos que entre ellos habrían de propinarse.

Por eso nadie habla directamente de un ganador, sino simplemente se señalan errores y aciertos de cada uno, pero no se puede decir, que en este debate hubo un ganador definitivo, pues todos dieron lo que tenían que dar, incluyendo al mismo López Obrador, personaje totalmente inculto que con su pobreza intelectual, pretende gobernar al país.

Si eso sucediera, pues como suele decirse en estos casos, que Dios no agarre confesados.

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Y MAÑANA, aquí nos encontraremos, si otra cosa no sucede.

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