Por primera vez en la historia del país, seis ciudadanos sin filiación partidista y supuestamente sin un voto definido realizarán cuestionamientos a los candidatos presidenciales en el segundo debate a celebrarse el 20 de mayo en la Universidad de Baja California en Tijuana. El INE contratará a una agencia de opinión pública para seleccionar a 600 personas que asistirán como público al debate, y de ese universo, seis tendrán la oportunidad de preguntar a los aspirantes. Se buscará que los 600 sean representativos de las expresiones sociales de la zona. La nota es de «24 Horas».