Cada año se destina el tercer domingo del mes de junio para honrar la labor de los padres de familia, aquellos que con su dedicación, amor, responsabilidad y sobre todo ejemplo, forman a hombres y mujeres que ven en ellos uno de los apoyos fundamentales en su vida.
Dedicados a sus hijos, llevan a cabo diversas actividades para conseguir el sustento que les permita darles una vida digna, tal es el caso de Ernesto Castañeda Camarero, un betunero del zócalo de la ciudad Veracruz que cuenta hoy con más de veinte años dedicado a esta noble labor.
“Mi oficio es betunero ya de años, mi padre me inicio en esto, me agrada mi trabajo, es un trabajo noble, sencillo y honrado”, declaró para XEU Noticias.
Continuó: “Normalmente yo llego de ocho, ocho y media de la mañana a cinco, seis de la tarde normal de lunes a viernes, los sábados de diez a cinco y los domingos a veces vengo, a veces no vengo lo agarro para descansar… mis clientes hasta ahorita muy bien, hablan muy bien, por el trato que les doy, el servicio que les brindo, muy bien, gracias a Dios”.
Comentó también que cada día atiende a decenas de personas: “Va variando, a veces me pueden llegar veinte, treinta clientes, como me pueden llegar diez, quince clientes”.
Ernesto disfruta hoy de su trabajo y de tener una familia numerosa con la que ha creado lazos inquebrantables: “Una familia unida, de hecho tengo 5 hijos, cuatro mujeres y un varón, siete nietos, dos nietos y cinco nietas”, apuntó.
Agregó: “De maravilla, tengo comunicación casi todos los días, nos hablamos por teléfono, platicamos y cuando voy pues me quedo allá una semana con ellos y estoy con los nietos y luego ellos también me vienen a visitar para estar aquí conmigo unos días”.
Sobre la paternidad, refirió: “Ser padre es una responsabilidad con los hijos y que pasa uno tiempos agradables con ellos, con la familia, pero más que todo lo pasa uno con los nietos porque tiene uno más tiempo con los nietos que con los hijos… cuando son los hijos, tiene uno que trabajar, no tiene uno tanto espacio para dedicárselos a ellos pero el tiempo que se puede se lo dedica uno con cariño y con amor”.
Aseguró que no ha sido fácil pues la responsabilidad de guiar a un nuevo ser requiere de muchos sacrificios, que para él bien valen la pena.
“Las dificultades muchas veces, lo que es el dinero porque incluye escuelas, comida, vestirlos, calzarlos que no es tan fácil, si habláramos de uno pues no hay tanto problema, pero hablamos de cinco y los estudios, ahorita tengo a las más chica que acaba de salir de la prepa y va a la universidad”, detalló.
Agradecido por contar con el cariño de sus hijos y nietos, para este padre ejemplar, el brindar mejores posibilidades a sus descendientes es algo que se logra con mucho amor.
“La expectativa de que hay una responsabilidad con la criatura, te pide de comer, no sabes si tienes o no tienes, tú tienes que conseguir para darles, vestirlos, calzarlos y llevarlos a la escuela, a la vez es satisfactorio porque le dedicas tiempo y lo haces con amor, es algo que siente uno, va un paso más adelante y diferente a cuando esta uno soltero”, concluyó.
Aquí, un ejemplo de cariño, dedicación y sobre todo amor, gracias Ernesto, Gracias Papás, que hoy siempre tengan un excelente ¡Día del Padre!.