Como es natural, conforme pasa el tiempo y los procesos jurisdiccionales se van cumpliendo y las fechas señaladas en las leyes van llegando a sus cumplimientos, Andrés Manuel López Obrador(AMLO) se va acercando a la codiciada silla presidencial.
El acto efectuado el pasado miércoles 8 del presente mes en las instalaciones del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF), en el que la Magistrada Presidenta del organismo que es la máxima autoridad en materia electoral del país, le entregó su constancia de mayoría que lo acredita como el Presidente Electo del país, ratifica la legalidad de la elección y por tanto la calidad de Presidente Electo de México del líder del Movimiento de Regeneración Nacional (MORENA).
Lo que como ya citamos en este espacio, de alguna forma de la a las declaraciones de AMLO un tinte de oficialización, por lo que todo lo que exprese a partir del miércoles ante los mexicanos debe ser con cuidado y respeto, pues lo está diciendo el Presidente Electo de México.
Así que lo expresado en su discurso en el TEPJF, es de gran importancia y debe considerarse ya no más como fue todo lo anterior, promesas de campaña. Las que lamentablemente en el medio político se les consideran tienen un valor de poca credibilidad, lo que no debe ser, pues ahora su posición en el ámbito gubernamental es la de primer nivel o sea la más importante del país.
Por lo tanto lo ratificado por el próximo Presidente de la República en ese acto, ya suena como un compromiso de gobierno. Y es dónde radica la importancia cuando habló del respeto de su parte a los demás poderes que tiene la estructura del gobierno de esta Nación. Como lo son el Legislativo y el Judicial. Lo que de darse llevaría a México a un fortalecimiento de la incipiente democracia que se ha estado viviendo desde el pasado año 200 y que con esta elección se ha visto fortalecido, pues pésele a quien le pese, una vez más la transición se llevó con toda civilidad y dentro del ámbito del derecho electoral.
Ahora solamente hay que observar lo que suceda durante estos aproximadamente cien días, a que el próximo 1 de diciembre oficialmente reciba la investidura como Presidente de la República Mexicana, cargo que Andrés Manuel López Obrador trató de alcanzar en forma directa desde hace aproximadamente 20 años. Y también no perder de vista cómo será su comportamiento a partir de esa fecha, que desde antes ha sido una incógnita y también ahora. Usted qué OPINA, estimado lector. Hasta el lunes. noti-sigloxxi@nullhormail.com (Fech. Púb. Vier. 10-agosto-18)