DICEN muchos analistas políticos que no entienden, todavía, el porqué se van dando los nombramientos a cuenta gotas, para ocupar los diversos puestos administrativos del futuro gobierno de Veracruz. Y es que el Gobernador electo, Cuitláhuac García Jiménez, no ha emitido información relacionada con todo su equipo de colaboradores, pues se van dando los supuestos nombres poco a poco, como si con esto se estuviera esperando la reacción de los veracruzanos.

Es decir, el futuro mandatario estatal, ha preferido soltar una a una, las invitaciones que ha hecho a los hombres y mujeres en los que tiene confianza para que se vayan preparando en los asuntos que tendrán a su cargo. Pero, claro, esto va despacio y el tiempo que falta para encontrarse con la responsabilidad de gobernar, es poco.

Sin embargo, no es necesario que desde ahora tenga listo el equipo de trabajo, pues hay que recordar que en otros tiempos, el gabinete se daba a conocer la tarde anterior a la rendición de protesta del Gobernador electo, es decir, que la misma tarde del primero de diciembre, tanto el mismo gobernador, como el Secretario de Gobierno, se daban a la tarea de dar posesión al equipo de colaboradores, anunciado el día anterior, acudiendo, incluso, a cada oficina de las dependencias gubernamentales, para que, con la presencia de los empleados y demás trabajadores, se le diera posesión directamente en su propia oficina a cada funcionario.

Desde luego que los tiempos han cambiado y ahora se estila una nueva forma de hacer las cosas, dentro de un gobierno distinto, más activo, más ágil, donde los nombramientos se van conociendo en tiempo y forma, aunque no sean precisamente oficiales, porque el mismo Gobernador electo, no tiene, todavía esa facultad que adquiere hasta que la representación popular se la otorga constitucionalmente.

Pues bien, hay preguntas al respecto y podríamos, en todo caso, pensar que Cuitláhuac García Jiménez, Gobernador electo, va analizando poco a poco los perfiles de quienes le van sugiriendo para tal o cual puesto gubernamental. No parece tener preferencia por los amigos y los compadres, sino por personajes de la vida pública o privada, que tengan conocimientos para llevar adelante una buena administración. Esto ha detenido, de alguna manera, todos los nombramientos.

No quiere caer, según se sabe, en los errores del pasado, donde los gobernadores han llamado a los amigos y compadres, para poder gobernar, dando como resultado final los hechos de los cuales tienen conocimiento todos los veracruzanos.

Cuitláhuac García Jiménez, tendrá la posibilidad de actuar en contra de quien no siga sus propios lineamientos, es decir, que no trabaje honestamente y que el manejo de los recursos, no sea transparente, dando lugar a posibles desvíos. Esa quizá, sea la ventaja que el nuevo gobernador, busca, al nombrar a personajes preparados, pero también funcionarios que pueda vigilar y que no lo vincule ningún compromiso para poder actuar en contra de él, una vez que se haya comprobado su deshonestidad.

Por eso se van dando muy lentos estos nombramientos que, seguramente, tendrán que estar listos, por completo, el día anterior a la rendición de protesta e inicio de la nueva administración estatal.

Hasta ahora, no parece que se vea el amiguismo y el compadrazgo en los nombramientos anunciados, por lo que todos los que se han ido conociendo como futuros funcionarios gubernamentales, están altamente comprometidos a hacer una buena labor, porque no fueron nombrados al vapor ni mucho menos por ser amigos del Gobernador.

Que hay sugerencias, claro que las hay, pero estas no comprometen al Gobernador, para poder nombrar a los funcionarios, sino que son propuestas que vienen acompañadas de una honesta hoja de servicios y a la cual tendrán que responden los mismos que han sido propuestos, pues si no quedan bien, tendrán el reclamo de quien los haya impulsado.

Podría ser, entonces, que la era del amiguismo, ya terminó en el gobierno del Estado de Veracruz, donde los funcionarios tenían y tienen manga ancha para hacer lo que les viniera o les venga en gana.

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AUNQUE TODO PARECE indicar que los gobiernos de Morena, no quieren barrer para atrás, como ha sido práctica común de los panistas y priistas, sino de aprovechar el tiempo y poder ofrecer a los gobernados mejores beneficios y posibilidades de una mejor vida, podría ser que por cuanto corresponde al ORFIS, se mantengan las cosas como están a fin de tener pleno conocimiento del Estado que guarda la administración estatal, con datos, sin lugar a dudas, de lo que también pasó en el gobierno duartista.

Se tiene que comenzar por tener bases y eso es precisamente lo que se espera de la futura administración, de tal manera, que si bien al gobierno de Duarte, se le revisaron cuidadosamente sus cuentas, lo más probable es que también, a la actual administración, se le hagan los mismos recuentos y evaluaciones para ver donde han quedado los recursos, aparte de aquellos que se deben y que también debe haber cuentas claras.

En este sentido, es posible que el Auditor General del ORFIS, Lorenzo Antonio Portilla Vázquez, permanezca en su puesto hasta en tanto no se tenga pleno conocimiento de lo que se ha hecho, de acuerdo a las auditorías generales de los entes fiscalizables.

Portilla Vázquez, de alguna manera, tiene que entregar cuentas claras respecto de las cuentas públicas del gobierno del Estado, sin ser, como se ha dicho tantas veces, tapadera del gobierno. No, lo más prudente, en este caso, es que también se diga como han terminado los años del gobierno en turno y presentar este panorama al nuevo gobernador del Estado.

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AUNQUE SE DICE que el futuro Presidente de la República, no barrerá para atrás, la mera verdad es que todavía no se sabe lo que va a pasar, porque en todo caso, si hubo algún acuerdo con el Presidente Enrique Peña Nieto, seguramente no habrá de incluir a los demás funcionarios, por lo que podrían darse sorpresas en este sentido, ya que hay muchas áreas donde bien se sabe que las cosas no andan bien y que será necesario poner el castigo ejemplar para quien no haya hecho las cosas bien.

Así, se entiende que ya se esta pensando en auditorías a dependencias como la Secretaría de comunicaciones y transportes, Petróleos Mexicanos, inclusive con el caso Odebrecht, que si bien no aplicará para el Presidente, sí para los que de alguna manera también se beneficiaron.

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Y MAÑANA, aquí nos encontraremos, si otra cosa no sucede.

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