Han pasado 5 décadas de uno de los movimientos estudiantiles más dolorosos y emblemáticos en Latinoamérica y en el mundo, el movimiento estudiantil de 1968 en nuestro país, que como en muchas partes del planeta significó un punto de inflexión para una serie de cambios en diferentes rubros.

Eran tiempos en que en el mundo sucedían hechos que convulsionaban. Pero en particular en 1968 suceden eventos muy estridentes: El fracaso de las ofensivas norteamericanas en la guerra de Vietman; la muerte de Martin Luther King, la “Primavera de Praga”, que da entrada al socialismo con rostro humano con Alexander Dubseky como líder pero que después de su atentado dos meses después, finalmente la URSS toma el control a través del Pacto de Varsovia; la muerte de Robert Kennedy; la criminalización de la Organización terrorista ETA en España de una organización que no mataba ciudadanos, a convertirse en ese año en un grupo sanguinario amenazante de la paz publica en ese país; la mision del Apolo 8 de ir a la Luna y regresar; el desalojo con violencia de los estudiantes de la Universidad Sorbona de Paris, las huelgas de los trabajadores en ese país, etc, etc.

Pero por otra parte 1968, marcó el comienzo de un mundo postmoderno que sembró la semilla de los medios de comunicación—el sistema vía satélite–, la masificación de la información y el acercamiento de los medios a las familias. Un año que a la manera de Mark Kurlansky : “…cambiaron muchos valores, actitudes, modos y maneras de entender la vida y al mismo tiempo, un año que sembró la semilla de un mundo mejor”

La mayoría de nosotros recordamos en nuestro país el 2 de octubre de ese año, como la fecha en que es reprimido– por el ejército y los grupos especiales de seguridad federal–, el movimiento estudiantil que surgiera como un simple problema (bronca) a inicios del mes de julio de ese año, entre los grupos de estudiantes de la prepa Isac Ochoterena y los de las vocacionales 2 y 5 del IPN. Un problema que se dejó crecer y que exhibió en un principio exceso de confianza y falta de sensibilidad para mediar el conflicto a través de las instancias internas y que lamentablemente llegó a las externas. Un problema que ya para inicios del mes de septiembre fue creciendo de manera sorprendente, hasta desencadenar en el mitin del 2 de octubre en la “Plaza de las Tres Culturas” en la Unidad Tlatelolco de la Ciudad de México, donde los ahí reunidos fueron agredidos y atacados de muerte, obteniéndose un saldo de decenas de fallecidos, así como de heridos y detenidos.

Pero desde la primera etapa y hasta al final del movimiento estudiantil, se caracterizó por dos elementos: el exceso de la represión y la presencia del ejército, pretextando frenar, según ellos, el involucramiento de “rebeldes” con inclinación “comunista” que supuestamente recibían consignas desde otros países para generar el desorden, y que deseaban aprovechar con ello sabotear los Juegos Olímpicos de ese año, entre otras razones, pero que desde la sociedad se percibió otra cosa: una clara demostración del abuso del poder por parte del Gobierno, las fuerzas militares y de seguridad, ante la incapacidad y falta de sensibilidad para dirimir las diferencias entre los grupos universitarios de aquellos años.

Pero lo más importante, el activo protagonismo de los estudiantes universitarios que buscaron una vía de reclamo a sus inquietudes a costa de todo, al principio en la ciudad de México y posteriormente en las entidades de la república que también se solidarizaron con el mismo.

El Estado de Veracruz, no estuvo exento de reacciones de los estudiantes y también del gobierno estatal para frenar el movimiento.Son los tiempos en que gobernaba el estado el Lic. Fernando López Arias (1962-1968), el Lic. Fernando García Barna como Rector de la Universidad Veracruzana (1961-1968) y el Mtro. Joaquín Carrillo Patraca como Secretario General de la U.V. El Alcalde de Xalapa era el maestro y abogado Othoniel Rodríguez Bazarte.

Y al tenor de lo que sucedía en México, los estudiantes de diferentes escuelas y facultades en la capital veracruzana, deciden apoyar el movimiento encontrándose también con una respuesta violenta por parte del gobierno que tuvo sus consecuencias.

Pero no quiero seguir comentando más, porque justamente la historia debe ser contada por quienes la vivieron , es por ello que Egresados de la Universidad Veracruzana, Asociación Civil (EUVAC), invita a todos los interesados a los eventos conmemorativos del “50 Aniversario del Movimiento Estudiantil de 1968”, para recordar los hechos especialmente en el Estado de Veracruz, mismo que se celebrará el día jueves próximo, 27 de septiembre a partir de las 18 hrs. en el Centro Recreativo Xalapeño (Xalapeños Ilustres esquina Insurgentes, centro), bajo el siguiente programa:

1.-Panel de protagonistas del Movimiento Estudiantil del 68 en Veracruz, en el que participarán: Mtro. Rafael Arias Hernández, Lic. Juan José Rodríguez Prats, Mtro. Guillermo Villar Glz y Mtro. Ernesto G. Fernández Panes.
2.-Premiación del Concurso de Ensayo: “El Movimiento Estudiantil del 68 en Veracruz”.
3.-Exposición de fotografías alusivas al hecho.