«Hace 50 años no había democracia en México, la llamaron dictadura perfecta, un sistema casi imperial, del presidente todopoderoso, únicamente limitado por el poder del tiempo. Con el movimiento del 68, México quería renovarse, quería gritar lo que nunca le permitieron gritar, quería expresarse. México, en ese entonces, obtuvo la respuesta: la sangre, el dolor y la muerte. Cincuenta años después, México cambió, y no lo hizo de la noche de a la mañana. Actualmente hay pluralidad, equidad de género, las redes que tienen un gran peso. 2 de octubre no debe olvidarse». Lo escribe Luis Cárdenas en «El Universal.. Pero México aun tiene mucho que mejorar en muchos aspectos de la vida nacional. Las urnas lo acaban de destacar. Foto de «Arquine!.