La amplia cobertura que todos los medios han dado y dan a López Obrador, y el tratamiento positivo de la información relacionada con él, genera la percepción de que ha sido valorado como el mejor presidente electo.

No es así y para eso hay que hacer el comparativo con los otros presidentes electos. Eso permite ver cuál ha sido el nivel de aceptación de cada uno de ellos al arranque de su mandato.

Los números de la serie de 18 años de la Evaluación del Presidente Electo, que Consulta Mitofsky levanta el mes de noviembre, antes de que asuman su cargo, son claves para la comparación. Es una encuesta nacional realizada en hogares.

A la pregunta: ¿Está de acuerdo o en desacuerdo cómo se ha conducido el presidente electo? La respuesta: En el 2000, 80.2% está de acuerdo como lo hizo Fox y 14.6% en desacuerdo; en el 2006, 64.1% está de acuerdo como lo hizo Calderón y 27.2% en desacuerdo; en el 2012, 54.4% está de acuerdo como lo hizo Peña Nieto y 34.6% en desacuerdo; en el 2018, 62.6% está de acuerdo como lo hizo López Obrador y 34.7% en desacuerdo.

La ventaja de Fox sobre sus sucesores es grande, tanto a nivel del acuerdo como en lo reducido del desacuerdo. A López Obrador le saca casi 20.0% en el acuerdo y otro tanto en un menor desacuerdo. Los números muestran que el presidente electo mejor valorado en los meses de la transición es Fox.

A la pregunta: ¿Cuál es la credibilidad del presidente electo? La respuesta: En el 2000, 69.2% siempre o la mayoría de las veces le cree a Fox y 24.6% nunca o casi nunca; en el 2006, 44.4% siempre o la mayoría de las veces le cree a Calderón y 35.8.2% nunca o casi nunca; en el 2012, 46.3% siempre o la mayoría de las veces le cree a Peña Nieto y 43.7% nunca o casi nunca; en el 2018, 60.3% siempre o la mayoría de las veces le cree a López Obrador y 29.3% nunca o casi nunca.

Fox vuelve a tener ventaja sobre sus sucesores y es al que más le creen y el que tiene el menor porcentaje de incredulidad. A Obrador le saca casi 9.0% en el siempre o la mayoría de las veces le creen y tiene 4.7 puntos menos de incredulidad. Una vez más los números muestran que el presidente electo mejor valorado en los meses de la transición es Fox.

A la pregunta: ¿Habrá un cambio de sistema o cambio de persona para gobernar el país? La respuesta: En el 2000, 59.6% con Fox decía cambio de sistema y 33.4% de persona; en el 2006, 37.0% con Calderón decía cambio de sistema y 51.4% de persona; en el 2012, 48.7% con Peña Nieto decía cambio de sistema y 36.2% cambio de persona; en el 2018, 53.9% con López Obrador dice cambio de sistema y 27.8% cambio de persona.

En el 2000, cuando ocurre la alternancia, las expectativas de que con la llegada de Fox habría un cambio de sistema son 5.7 puntos por arriba de las que ahora se tiene con López Obrador. Este último tiene mejor posición que Fox, son 5.6 puntos menos, de que el nuevo gobierno sería sólo un cambio de persona.

De los últimos cuatro presidentes electos el presidente mejor evaluado ha sido Fox. Los años pasan y esta realidad tiende a olvidarse, pero ahí están los números. Estos datos pueden o no gustar, pero ya no se pueden cambiar. Lo que el próximo presidente sí puede modificar es su valoración a lo largo de su mandato. En eso también hay que hacer la comparación con los presidentes anteriores. Se verá, entonces, si es o no mejor valorado.