Decenas de miles de personas acompañaron este domingo el ataúd que llevaba los restos del general iraní Qasem Soleimani por dos ciudades iraníes importantes.
El comandante falleció en un ataque perpetrado hace unos días por Estados Unidos que aumentó las tensiones entre ambos países.
El Presidente estadounidense Donald Trump amenazó con bombardear 52 sitios en Irán si éste toma medidas en represalia y ataca blancos estadounidenses. Por su parte, la Embajada de Estados Unidos en Arabia Saudí alertó a los estadounidenses de un alto riesgo de ataques con misiles y drones.
En tanto, Teherán prometió alejarse aún más de su acuerdo nuclear con las potencias mundiales como respuesta a la ejecución de Soleimani.
Un bombardeo estadounidense en Bagdad provocó la muerte de Soleimani el viernes e intensificó la crisis entre Teherán y Washington, luego de meses de ataques y amenazas comerciales que inquietaron a Medio Oriente.
El conflicto se agravó desde que Trump retiró a su país del acuerdo nuclear que Teherán firmó con potencias mundiales a cambio de acotar su programa atómico.
Irán ya prometió una «fuerte venganza» por el ataque estadounidense. Muchos consideraban a Soleimani como un pilar de la República Islámica en momentos en los que se veía afectada por sanciones de Washington y por protestas contra el Gobierno iraní.
Las represalias por la muerte del comandante podrían venir de las fuerzas asociadas que supervisaba como general de una unidad élite dentro de la Guardia Revolucionaria. Esmail Ghaani, adjunto de Soleimani por mucho tiempo, ya asumió el cargo de comandante de la Fuerza Qud.
El sábado por la noche, una serie de proyectiles lanzados en Bagdad se impactaron dentro o cerca de la Zona Verde, donde se encuentran oficinas gubernamentales y embajadas, incluida la de Estados Unidos.