Réquiem a don Adalberto Tejeda Patraca

Raúl López Gómez

Personajes de Veracruz, así se publicó apenas el pasado 22 de enero de 2019, parte de su gran semblanza en donde se decía: reconocido como uno de los más destacados y prestigiados ex alcaldes de Veracruz, el licenciado Adalberto Tejeda Patraca, un hombre de principios y valores humanos, ético y apasionado del derecho, de la vida política nacional, pero, sobre todo, como todo un soñador, desea que le vaya bien a México y a los pobres y clasemedieros, “en principio”.

Alcalde emprendedor en su tiempo, reformador, austero y dueño de una gran cultura jurídica, que le dio por ser un estudiante de primer nivel entre los miembros de la gran Generación 1959-1963 de la Facultad de Derecho de la Universidad Veracruzana, en donde se siente honrado de todos sus compañeros de este prolijo y exitoso grupo en donde compartió el aula con personajes de la talla de Guillermo Ortiz Mayagoitia, Reynaldo Madruga Picasso, José Pérez Troncoso Virgilio Cruz Parra, Avelino Muñiz García, Sergio Flores Armida, todos vivos y viables como los abogados que trascienden a la vida pública de este país con grandes aportes en la ciencia del derecho y la administración pública.

El licenciado Tejeda Patraca, siempre tenía los grandes recuerdos para su gran amigo don Ignacio Morales Lechuga, a quien le unió una inquebrantable amistad de muchos años, en donde Beto Tejeda nunca dejó de enaltecer la obra y talento del famoso Nacho Morales, desde comenzó parte de su trayectoria en el servicio público en el Estado de Veracruz, como poderoso secretario general de gobierno.

Se destacaba de Don Adalberto Tejeda Patraca, “vive al estilo de Gandhi, emulando sus principios de abogado justo y honesto, de luchador incansable y de una apuesta a la paz, y a la certeza del derecho ante todo”.

Como alcalde del puerto de Veracruz, se caracterizó por la sobriedad de su mandato y nunca cambió su manera de ser sencilla y en estricto apego a la filosofía juarista de vivir en la medianía, pero en la realidad se acercaba más a estar cerca de una clase media más cercana a los pobres.
Litigante de toda la vida, desde muy joven se dedicó a la carrera de abogado postulando a la que nunca dejó de ejercer, y se destacó como un jurisconsulto honesto y ético.

En los tiempos de convivencia de siempre don Beto Tejeda, siempre se detenía a platicar con la gente a dar un saludo y un mensaje siempre positivo.

Se caracterizó por su honorabilidad de crecer en la política en tiempos del gobernador don Agustín Acosta Lagunes y de su amigo el entonces secretario de gobierno, Ignacio Morales Lechuga, con quien le unió una gran amistad de toda la vida.

En aquel tiempo fue diputado local y presidente municipal de Veracruz, en donde desarrollo un brillante papel de servidor público.

En los últimos años dedicó la mayor parte de su tiempo a atender su rancho y a tratar de crear un desarrollo inmobiliario en una propiedad que tenía en el municipio de Alvarado, sin llegar a consumar ese propósito a pesar del empeño en alcanzar su objetivo.

El licenciado Adalberto Tejeda Patraca, llevaba una vida sana, disfrutaba la comida vegetariana y por lo mismo, nunca enfermó y se mostró resistente al paso del tiempo, e incluso siempre decía que iba a vivir más de cien años, por su régimen de llevar una vida sana.

Ayer por la noche un accidente automovilístico en la carretea de Veracruz-Alvarado, sufrió el percance que le quitó la vida, pero no sus sueños y su trascendencia a un gran legado que deja en favor de sus paisanos y de sus hijos.

La solidaridad con su esposa Lulú, sus hijos y sus muchos amigos y colegas abogados en la entidad veracruzana.

Don Adalberto Tejeda Patraca, tenía más de dos décadas de haberse retirado del servicio públicos y después de ocupar la alcaldía de Veracruz, se dedicó a litigar, además de compartir sus experiencias para dar paso a las nuevas generaciones. QEPD. Así las cosas