Los temores de la Organización Mundial de la Salud (OMS), de que el nuevo COVID-19 llegara al continente más pobre del planeta se hicieron realidad. Este viernes el coronavirus, que ha matado a casi mil 500 personas, registró un caso en Egipto.
El Ministerio de Salud egipcio informó que una persona fue diagnosticada con el COVID-19, según cita la prensa local.
De acuerdo con las autoridades sanitarias de El Cairo, se trata de un extranjero que no tenía síntomas de la enfermedad y ahora está aislado en un hospital.
El centro médico donde se encuentra el paciente informó de inmediato a la OMS.
Cuando la agencia sanitaria de Naciones Unidas declaró la emergencia internacional, advirtió que la medida respondía a la preocupación de que la enfermedad se propagara en países con sistemas de salud débiles. Egipto no es de los países más pobres de África, pero el hecho de que haya un infectado en su territorio, eleva el riesgo de un contagio para el continente negro.