Óscar Chávez
Murió el legendario Óscar Chávez (Ciudad de México, 20 de marzo de 1935, 30 de abril de 2020), para no variar, víctima de esta terrible pandemia llamada covid-19. Acababa de cumplir de cumplir 86 años. Al cantautor, actor e intérprete lo descubrí mucho antes de su faceta lírica, por su participación en la ya clásica cinta ‘Los Caifanes’ (Juan Ibáñez, 1966) en el mítico papel que lo encumbró, y también de alguna manera lo inmortalizó, de ‘El Estilos’, un personaje más bien pequeño burgués que formaba parte de esa banda de mozuelos “malos” de estratos urbanos bajos del Distrito Federal de los años 60 integrada por ‘El Gato’ (Sergio Jiménez), que la hacía del líder y los esbirros ‘El Azteca’ (Ernesto Gómez Cruz) y ‘El Mazacote’ (Eduardo López Rojas).
La trama la completaban Julissa y Enrique Álvarez Félix, que interpretaban a una pareja amorosa de jóvenes burgueses y que, por azares del destino se topan en una noche loca con la pandilla conocida como Los Caifanes (caifán, aparentemente es un anglicismo –pocho- que quiere decir “sujeto al borde de la ley que ha conseguido el respeto y liderazgo de su barrio”). La cosa es que esa noche, que hoy denominaríamos de copas, coinciden por puro azar cuatro “ñeros” de baja ralea con una típica pareja de burguesitos bien educados con los que emprenden una loca aventura que los lleva a recorrer y a vivir una experiencia muy común para los pandilleros, pero totalmente desconocida para la pareja de enamorados.
No quisiera adentrarme más en la temática de la película, solo agregaría que ‘Los Caifanes’ se convirtió en una cinta de culto, muy original, disruptiva, que fue como un canto a la rebeldía que dos años más tarde se expresaría de manera trágica el 2 de octubre del 68. Sus personajes se convirtieron en el sello que caracterizó a aquellas lejanas generaciones de jóvenes sesenteros.
Pero ya centrándome en Óscar, el cantante y compositor, sería muy injusto de mi parte hacer una evocación de él a partir de la cinta comentada líneas atrás. Fue en su larga trayectoria más que ‘El Estilos’. Probablemente Óscar, junto con Guadalupe Trigo, Viola Trigo, Tehua, Gabino Palomares, Amparo Ochoa y Los Folcloristas, Fueron la expresión más acabada de un movimiento musical de canto de “protesta” en México, sobre todo en los años 70, 80 y parte de los 90. Pero el único que sobrevivió a ellos hasta nuestros días –cosa que digo con melancolía-, y además con bastante éxito y popularidad diría yo, precisamente fue el gran Óscar Chávez, con interpretaciones de mucho arrastre como ‘Por ti’, Macondo’ (en homenaje a García Márquez) y con estilo inconfundible del vallenato colombiano; La mariguana, Mariana, el Corrido de Juan Cortina y El Charro Ponciano.
Gran voz, gran artista, todo un personaje, disruptivo él mismo, identificado con la izquierda de México y de Latinoamérica.
Descanse en paz Óscar Chávez.
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