Ya tengo un buen de años, pero nunca en mi vida había tomado una copa de vino o de licor diaria. Ahora en el confinamiento, y como no puede uno ir con los amigos, salvo un día a la semana que descanso, ya lo estoy haciendo. La bebida que me toca depende del nivel de mi presión arterial. Si ésta anda en 150 o más,  tomo un whisky; si anda por 135-140 me toca una copa de vino tinto; y si anda normal, en 120, como este miércoles, corresponde un ron. A la salud de ustedes. Hay que cuidarse.