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Excélsior

El equipo de Coapa perdió 1-0 como visitante ante el Atlanta United, pero con el global de 3-1, los azulcremas se llevan la eliminatoria.

 @ClubAmerica

América volvió a la acción tras la eliminación en la liguilla del torneo Guardianes 2020 y se presentó en la cancha del Exploria Stadium para confirmar su pase a la semifinal de la CONCACAF Liga de Campeones, tras vencer en el global 3-1 al Atlanta United, en un partido que Guillermo Ochoa salvó de la catástrofe.

Pese a las importantes ausencias en su aparato ofensivo, Atlanta salió a proponer el encuentro. La necesidad los llevó a apretar desde que la pelota se puso en marcha y de no ser por Guillermo Ochoa, hubiesen encontrado los goles que buscaban.

El arquero azulcrema salió en plan grande y tuvo un par de intervenciones valiosas para la causa americanista. Primero, tapó un disparo cruzado y potente de Franco Escobar en una de sus incorporaciones al frente. Después de eso, López habilitó con la cabeza a Barco, quien apareció a la espalda de los defensores y remató con ventaja, mas los reflejos de Ochoa lo llevaron a quedarse con la bola sin dar rebote.

Del otro lado, las “Águilas” lucían timoratas al frente. Fue poco lo que remataron a puerta en los primeros 45 minutos. Apenas un cobro de tiro libre de Richard Sánchez y un contraataque mal definido por Córdova, pero nada más.

Para el complemento, América le cerró las vías a un Atlanta que no encontraba ya por donde hacer daño. Por si fuera poco, el cronómetro ya era otro enemigo suyo toda vez que los minutos transcurrían y no lograban siquiera acercarse en el marcador global.

Tuvieron que pasar 75 minutos para que los cremas se manifestaran con peligro en el área rival. Viñas recuperó un balón en la salida de Atlanta y cedió a Cóerdova, quien a su vez habilitó a un Jesús López que entró sin marca, remató y encontró un desvió defensivo que mandó a tiro de esquina.

Cerca de la recta final, Atlanta finalmente encontró el fruto de su esfuerzo. Ballo se sumó al ataque, desbordó por derecha y sacó un centro a segundo palo que Conway no desaprovechó. Su remate de cabeza fue imposible para Ochoa, quien solamente vio la caída de su meta.

cmb

Foto de archivo.