El subgobernador del Banco de México, Jonathan Heath, destacó que aún suponiendo que se creciera por arriba del 4% o incluso del 6%, se trataría de un crecimiento “mediocre” después de la caída de 8.5% en el 2020..
Para el subgobernador del Banco de México (Banxico), Jonathan Heath, hay una gran cantidad de incógnitas que hacen prever que el crecimiento económico de 2021 será débil e incierto.
Durante su participación en el podcast Norte Económico de Banorte, destacó que aún suponiendo que se creciera por arriba del 4% o incluso del 6%, se trataría de un crecimiento “mediocre” después de la caída de 8.5% en el 2020.
“Crecer arribita de 4 en cualquier año dado, estaríamos brincando de felicidad, porque no hemos crecido arriba de 4 en mucho tiempo. Pero en el contexto que viene después de un año con una caída de 8.5 realmente es muy decepcionante”, dijo.
Resaltó que, en lo que cabe, la contracción de 8.5% en el 2020 fue algo positivo, si es que se compara con lo que se preveía meses antes de una caída del Producto Interno Bruto (PIB) de entre 10 y 12 por ciento.
“Sin menospreciar que el año en conjunto fue nefasto y fue de los peores que hemos visto en un siglo, pero de todos modos terminamos relativamente bien”, expuso.
No obstante, el subgobernador del Banxico mencionó que se terminó el 2020 e inició el 2021 con una nota negativa, que fue el nuevo cierre actividades económicas en algunas entidades, lo que hará que en el primer trimestre de este año, el crecimiento sea casi negativo.
Exportaciones, empleo e inversión, los que apoyarán la recuperación
Heath consideró que lo que hará la diferencia es la campaña de vacunación contra Covid-19, aunque refirió que se ha iniciado a ritmo lento en México.
Agregó que si bien las exportaciones han repuntado, no será suficiente, por lo que estimó que lo que hará la diferencia entre el corto y mediano plazo, es también la recuperación del mercado laboral, aunque mencionó que en las actuales circunstancias, habrá una afectación en el ingreso de las personas, lo que hará que el consumo de los hogares tenga una recuperación lenta.
Mencionó que otro elemento que haría la diferencia, es recuperar la capacidad de inversión fija bruta, volteando a la inversión privada.
“Necesitamos un gobierno que no solamente voltea al sector privado, sino que se sienta con él, que se agarran de la mano y empiezan a trabajar juntos, pero no a nivel de una mesa de diálogo, (sino) verdaderamente trabajar juntos, porque uno necesita del otro”, puntualizó.
Reforma fiscal eficiente
Y dado que, con base en los argumentos de austeridad del gobierno, será difícil ver medidas contracíclicas ante la crisis, Heath planteó que la administración pudiera ponerse de acuerdo con los legisladores sobre una reforma fiscal eficiente que logre elevar los ingresos públicos para que a la vez haya un gasto eficiente.
kg
Foto de El Economista.