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La Jornada

La presidenta del Senado, Olga Sánchez Cordero en imagen de archivo. Foto Cristina Rodríguez

La presidenta del Senado, Olga Sánchez Cordero, confirmó que como secretaria de Gobernación tuvo diferencias y discrepancias, con el entonces consejero jurídico de la presidencia de la República, Julio Scherer Ibarra, por la intromisión de éste en asuntos que eran facultad de la dependencia responsable de la política interior del país.

Entrevistada esta tarde, al término de la sesión de esa cámara, Sánchez Cordero reveló que hubo incluso tensión cuando ambos eran integrantes del gabinete presidencial, porque Scherer Ibarra se había “arrogado”, como consejero jurídico, las atribuciones y competencias que en la Ley Orgánica de la Administración Pública Federal se otorgan a la Secretaría de Gobernación.

Facultades, agregó, relacionadas con la relación con los demás poderes: “Con el Poder Judicial, con la Fiscalía, con el Poder Legislativo” , que él asumía sin que le correspondiera y que ella tenía que defender las competencias de la Secretaría de Gobernación.

“Yo no estaba defendiendo a la secretaria de Gobernación, estaba defendiendo a la Secretaría de Gobernación en sus atribuciones y en sus facultades”, insistió. “Esa fue la principal diferencia que tuvimos, permanentemente.”, recalcó.