La del Maestro es sin duda una de las profesiones más nobles y con mayor responsabilidad que existe. Sin embargo, debemos recordar que la educación en materia de valore no le pertenece al profesor o escuela en turno, esa responsabilidad es de nosotros los padres de familia. A la escuela debemos de mandar a niños y jóvenes que respeten a sus profesores. Que nuestros hijos entiendan bien que la autoridad a cargo es el profesor y que deben sujetarse a las reglas establecidas por ellos. Muchas felicidades a las y los maestros. Lo escribe Liliana del Carmen Cerecedo en el periódico «Alégrate», de la Arquidiócesis de Xalapa. Foto de «Milenio».