La operación de drones ayuda a identificar, localizar y eventualmente eliminar tanto las áreas donde los vectores dejan sus huevos, como los espacios donde reposan.
A través del uso de drones, la Secretaría de Salud y el Instituto Nacional de Salud Pública (INSP) generan mapas donde se identifican áreas consideradas de riesgo por ser criaderos del mosquito Aedes aegypti, el cual, es el principal transmisor de dengue, zika y chikungunya.
Rogelio Danis Lozano, director del Centro Regional de Investigación en Salud Pública (Crisp) del INSP, con sede en Tapachula, Chiapas, explicó que la operación de drones ayuda a identificar, localizar y eventualmente eliminar tanto las áreas donde los vectores dejan sus huevos, como los espacios donde reposan
Los drones se ponen en funcionamiento a mediodía, que es cuando los mosquitos salen a poner los huevos en los recipientes que tienen agua, luego estos insectos buscan lugares donde haya cierto tipo de vegetación para reposar. Posteriormente, buscan una nueva fuente de alimentación, que en este caso se refiere a humanos. En ese punto puede empezar el proceso de infección relacionado con enfermedades transmitidas por vectores”.
Añadió, que de acuerdo al proyecto de investigación “Modelos de aprendizaje automático para la predicción temprana de áreas de riesgo de transmisión de arbovirosis”, implementado por el INSP y el Centro Nacional de Programas Preventivos y Control de Enfermedades (Cenaprece), el uso de drones permite extraer imágenes e información del entorno urbano con mayores ventajas que la tecnología satelital.
Cabe señalar que los hallazgos de este proyecto de investigación, que lleva cinco años de desarrollo, fueron plasmados en el artículo Mapping the urban environments of Aedes aegypti using drone technology publicado el pasado 15 de septiembre en la revista drones por el Multidisciplinary Digital Publishing Institute (MDPI por sus siglas en inglés), con sede en Suiza.
fdm