Hace casi dos años que falleció el estimado profesor y ex-alcalde de Coatepec, Miguel Angel Rodríguez Peralta. Su hijo, Miguel Angel Rodríguez Todd, nos compartió la siguiente anécdota: «Mi padre se propuso ir al Vaticano a la Ceremonia de Beatificación de Monseñor Guízar y Valencia en enero de 1995, la cual sería presidida por el Papa Juan Pablo II. Se preparó con mucha anticipación, como hacía todo lo que planeaba, y no sólo eso, soñó con entregarle a Su Santidad un presente coatepecano, por lo que mandó a confeccionar una carpeta de escritorio en la Talabartería «El Tigre», labrada en cuero con el rostro del Pontífice. (una verdadera joya artesanal de la que César Guzmán no me dejará mentir). Entonces, yo, veinteañero en esa época, con escepticismo,, trataba de decirle lo excesivamente complicado que sería alcanzar su sueño, con la intención de evitarle una frustración, Nada hizo que se apartara de su objetivo, y a su regresó me mostró las fotos del momento en que le entrega a Juan Pablo II la carpeta, y a cambio el Papa le obsequió un Rosario que sacó de su sotana. A su regreso sin más,, mi papá me dijo ¿No que no? Para que aprendas». Bonita historia y enseñanza de vida.