Esta mañana que pasamos enfrente del Pasaje Enríquez de esta capital, recordamos que faltaba algo dentro del paisaje normal en la entrada del edificio Enríquez. El famoso bolero Antonio Ortiz «El Zorrito», quien diariamente congregaba a varios amigos alrededor de su cajón de trabajo, algunos para que les lustrara sus zapatos y otros más sólo por oír sus anécdotas y sus albures. Descanse en paz el «Zorrito». Foto de Alfredo Todd.