Nos dicen legisladores de oposición, e incluso algunos de Morena, que en la Junta de Coordinación Política no cayó nada bien que el presidente del Senado, Gerardo Fernández Noroña se hubiera autoinvitado para viajar a Washington para reunirse con Congresistas y cabildear en conta del impuesto a las remesas, lo cual no fue aprobado.. Tampoco recibió el respaldo de la Presidenta Sheinbaum por haber forzado a un particular a pedirle disculpas al Senado en un acto público. Lo comentan en «Bajo Reserva de El Universal» y en «Confidencial de El Financiero». Foto de Milenio.