Ha andado un poquito mal de sus oídos, por eso no ha habido reuniones de «Otero Ciudadano», pero confía en que el miércoles de la próxima semana se pueda llevar a cabo el desayuno-reunión, con el flamante Delegado Regional de Gobernación, el gran amigo de Luis Enrique Miranda, nuestro conocido Alberto Amador Leal. Y el miércoles de la posterior semana, con «Toño» Manjarrez del INE (el hombre que, de chamaco, le boleaba los zapatos al gobernador de Nayarit).