«Lo bueno para Enrique Peña Nieto sería que su proyecto modernizador ganara la candidatura presidencial dentro de su partido, y luego ganara en las urna. Ambas cosas están en chino. Lo bueno para el futuro del país sería que el ganador de las próximas elecciones presidenciales compartiera el proyecto de quienes quieren en los partidos y en la sociedad, modernizar a México. El dilema para Peña es si pondrá sus esfuerzos políticos a favor de la continuidad del proyecto, aunque pierda su partido, o remará en favor de su partido, aunque ponga en riesgo su proyecto». Lo comenta Héctor Aguilar Camín en «Milenio».