A 107 años de que se realizara la declaratoria del Día Internacional de la Mujer trabajadora, en la 2ª Conferencia Internacional de Mujeres Socialistas reunidas en Copenhage, Dinamarca (1910), en donde a petición de la comunista Alemana Clara Zetkin se exigió justicia por los crímenes cometidos en contra de las obreras de la Fabrica Cotton Textil Factory de Nueva York en 1857 calcinadas por haber externado su reclamo de mejores condiciones salariales, jornada justa y trato humano y que, derivado de ello se instituyó el Día Internacional de la Mujer en el mundo, y no obstante que las mujeres han ido superando barreras ancestrales que impedían su pleno desarrollo social, intelectual y político, parece increíble que se den –en la segunda década del siglo XXI– claros ejemplos de misoginia de parte de gente aparentemente preparada y con posiciones políticas relevantes.
Y para muestra un botón lo que sucedió hace apenas 3 días, el pasado día 1º de marzo en el Parlamento Europeo, en el que el Eurodiputado polaco Janusz Korwin-Mikke con fama de misógino, machista y conocido por sus comentarios racistas, sexistas y antisemitas, arremetió contra las mujeres, mencionando que: “las mujeres deben ganar menos porque son inferiores a los hombres”, comentario que dio mucho de qué hablar y por el cual la parlamentaria socialista española Iratxe García, salió al quite.
Korwin-Mikke, es un polémico político que no es la primera vez que es sancionado por sus exabruptos, en este caso, defendiendo la brecha salarial a favor de los varones considerando que las mujeres deben ganar menos porque son “inferiores”.
Ya desde hace dos años este señor, había externado una serie de improperios en contra de las féminas al decir:
«¿Sabe usted qué papel ocupaban las mujeres en las Olimpiadas griegas? La primera mujer, ya se lo digo yo, ocupó el puesto 800. ¿Sabe usted cuántas mujeres hay entre los primeros cien jugadores de ajedrez? Se lo diré: ninguna. Por supuesto que las mujeres deben ganar menos que los hombres porque son más débiles, más pequeñas, menos inteligentes»
Ante tales argumentos, la diputada española Iratxe García le reviró: “Mire, señor diputado. Según sus teorías, yo no tendría derecho de estar aquí como diputada. Y sé que le duele y le preocupa que hoy las mujeres podamos estar representando a los ciudadanos en igualdad de condiciones. Yo aquí vengo a defender a las mujeres europeas de hombres como usted”.
Dicha posición fue apoyada por otros parlamentarios como el líder de los socialistas, el italiano Gianni Pittella y el del presidente, el italiano Antonio Tajani, quienes pidieron «una sanción ejemplar” ante tales declaraciones, que van contra los principios de igualdad de género y una investigación al respecto para sancionar una vez más al susodicho sujeto.
Pero la posición del político polaco, no es la única. Tan sólo como ejemplo puedo mencionar las barbaridades que han dicho en el tiempo, directa o indirectamente, algunos políticos y personas frente a las féminas: «Las leyes son como las mujeres, están para violarlas»: Juan Manuel Castelao, expresidente del Consejo General de la ciudadanía Española en el exterior. «El pollo que comemos está cargado de hormonas femeninas. Por eso los hombres, cuando comen este pollo, tienen desviaciones en su ser como hombre”: Evo Morales. «El 75% de los hogares de México tienen una lavadora, y no de dos patas o de dos piernas-refiriéndose a las mujeres—, una lavadora metálica»: Vicente Fox en febrero de 2006. “Aflojó el cuerpo”: Gerardo Fernández Noroña, le dijo a la diputada federal Ruth Zavaleta cuando ésta reconoció a Calderón como Presidente Constitucional. “Aunque la fresa se vista de seda, peda se encuera”, anuncio de una barda publicada por la difusora 95.5 del grupo MVS en Guadalajara, Jalisco. “Están rebuenas para cuidar a los niños y atender la casa”: expresión de Francisco Vega de la Madrid, Gobernador de Baja California, durante un acto posterior al Día Internacional de la Mujer , etc. etc.
En fin, lo anterior sólo demuestra que aún no están conscientes muchos varones —políticos o no–del respeto mutuo que debe privar entre hombres y mujeres. Incluso a algunos los delata el subconsciente, porque vociferan en contra de compañeras, demostrando ser muy duchos con las de fuera, pero en su casa tienen menos fuerza “que un Tehuacán destapado”, después de 3 días”.
Luego entonces, lo anterior nos demuestra, que por mucho que pasen los años y existan avances educativos, sociales y políticos en favor de la igualdad, mientras las mujeres no nos preocupemos y ocupemos de cambiar esa cultura machista empezando desde cómo educamos a nuestros hijos, cómo llevamos nuestra relación en pareja y cómo nos damos a respetar frente a los varones, los pensamientos retrógradas, misóginos y ofensivos de muchos de éstos, seguirán existiendo.
Hoy que se presenta una mayor competencia profesional y política, parece ser que se intensifican las torpezas y vulgaridades que salen de la boca de ciertos varones –siendo imperdonable que sea de los que se dicen de primer nivel–, para mostrarnos que aunque ostenten cargos y alcancen los más altos grados académicos o políticos, su mentalidad está desfasada, es vulgar y machista; y dentro de una personalidad vulgar y machista, en el fondo, existe resistencia, violencia o coraje hacia las mujeres y eso es razón suficiente para continuar pugnando a favor de una cultura de la igualdad y del respeto en común, porque aún quedan muchas actitudes y mentalidades que cambiar en pleno siglo XXI.
Por eso este 8 de marzo, envió un fuerte abrazo a todas las mujeres del mundo: niñas, adolescentes, jóvenes, adultas y aquellas adultas en plenitud. Feliz Día Internacional de la Mujer. Que siempre les sean reconocidos sus valores y capacidades, como hijas, esposas, madres, abuelas, hermanas y como miembros vitales de una sociedad, que mucho les necesita para avanzar con rumbo claro y mayor celeridad.
Gracias y hasta la próxima