A pesar de que el enterado columnista Salvador García Soto señaló que ya estaba tomada la decisión de que Enrique Ochoa saldría de la dirigencia nacional del PRI y sería sustituido por Rubén Moreira, aquél se puso reza y reza y con el espaldarazo que en los últimos días le dieron el candidato Meade y la mayoría de los gobernadores priistas ya ahora es más probable que continúe al frente del tricolor.