Agustín Basilio de la Vega
Este inicio de semana la comunidad católica de Xalapa y de todo México se congratuló con el anuncio que hizo el papa Francisco de otorgarle la dignidad cardenalicia al Arzobispo Emérito Sergio Obeso Rivera oriundo de esta ciudad.
La noticia se conoció desde las 6:00 a través de las redes sociales del pasado domingo y durante todo el día fue “tendencia” gracias a muchos de sus amigos y admiradores. El 29 de Junio, Monseñor Obeso, recibirá en el vaticano el capelo que lo distinguirá como cardenal y al siguiente día se le “encomendará” una iglesia en Roma en donde se colocará su retrato al óleo.
Esta distinción obedece al reconocimiento que la Iglesia Católica hace de la trayectoria, el testimonio y el legado de Don Sergio. Es el único Obispo Mexicano que ha sido tres veces Secretario General de la Conferencia del Episcopado Mexicano y durante esos años, entre otras cosas, se restablecieron las relaciones entre el Gobierno Mexicano y la Iglesia Católica. Esto último, es de gran importancia para el respeto de las libertades, la civilidad y la normalidad democrática nacional.
Xalapa no es una gran metrópoli como México, Guadalajara o Monterrey de millones de habitantes donde generalmente residen los cardenales, por lo que es todavía más especial que cuente con uno. Esta ciudad es por tanto copartícipe de esta bendición.
Nuestra capital hoy es grande en otro sentido, no por ser una gran urbre sino: por su Santo San Rafael Guizar, por su comunidad católica comprometida con los valores del evangelio, por su Seminario y maestros de gran tradición, por sus sacerdotes sabios y por sus piadosas religiosa. Ahora será reconocida también por el trabajo ejemplar en favor de la iglesia particular y la iglesia mexicana de un pastor de gran capacidad intelectual y extraordinario testimonio cristiano.
Don Sergio no se ira a Roma a trabajar, no se le encomendará tarea alguna y seguirá entre nosotros impartiéndonos su bendición y animándonos con su ejemplo a servir al prójimo. Por tener más de 80 años (tiene actualmente 86), de acuerdo a los ordenamientos canónicos, no podrá participar en el conclave para elegir al próximo papa. Seguirá en su retiro disfrutando también de sus familiares y amigos.
A todos los que lo conocemos, nos llena de alegría este reconocimiento y nos anima a seguir su ejemplo de trabajo incansable, disposición incondicional de servir y de prudencia en todo momento.
Muchas felicidad a Monseñor Sergio Obeso Rivera y felicidades a toda la comunidad que tendrá el orgullo de sentirse acompañada por el séptimo cardenal en la historia de México y el primero en ser Veracruzano. Oremos por el cómo discretamente lo ha pedido. @basiliodelavega 21 de mayo de 2018