Independientemente de la discusión que se viene presentando desde unas semanas antes de que se llevara a cabo la jornada electoral el pasado domingo 1 de julio, sobre la construcción del Nuevo Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México (NAICM) y la opción que propone el equipo de trabajo del Presidente electo de nuestro país y lo más fuerte de la clase empresarial mexicana, a partir de la semana pasada hubo que sumar a esta discusión, la situación de la caravana de migrantes centroamericanos que el pasado viernes llegó a la frontera sur de México.
Situaciones que quiérase o no aceptar, está enfrentando el gobierno priista de Enrique Peña Nieto, lavándose las manos en lo que corresponde al NAICM. Pero teniendo que enfrentar porque aún está en funciones la difícil situación que se está gestando para nuestro país por la caravana de los migrantes centroamericanos. Pues no solamente existe la presión del presidente de los Estados Unidos de Norteamérica Donald Trump, de no dejarlos seguir su viaje, situación que solamente corresponde al Gobierno de México decidir, sino lo principal, que pasará aquí en tierras nacionales si en lugar de seguir hacia donde pueden lograr el llamado “sueño americano”, deciden como ya lo han expresado muchos de ellos quedarse aquí.
Hasta el momento la actuación de nuestro gobierno federal sobre como podrán ingresar al país, ha sido inteligente pues está fundamentada legalmente al solicitar que sea en forma ordenada y presentando pasaporte y visa. O que soliciten en forma legal asilo, para lo que tendrán que reunir los requisitos. Lo que permite se rechace a todo aquel que lo trate de hacer por la fuerza y no cumpla con los requisitos que para ingresar a cualquier país generalmente se solicitan.
Lo citado seguramente eliminará a un número importante de los migrantes que desean entrar a México para dirigirse al vecino país del norte, pero de los que logren entrar, cuántos lograrán pasar a los Estados Unidos y cuánto tiempo tardarán. Así como también, viviendo las dificultades que será el poder pasar el Río Bravo, cuantos decidirán quedarse en este país.
México es una nación en desarrollo, que tiene graves problemas por resolver como es la corrupción, la inseguridad y el desempleo, entre otros. Estamos viviendo un cambio de gobierno que es posiblemente el más importante de los últimos 50 años y que tendrá una gran responsabilidad en el desarrollo del futuro de nuestra nación, por lo que todo lo que se tenga planeado hacer tiene que estudiarse muy bien y llevarse a la práctica tratando de no cometer errores.
Lo que solamente se podrá lograr evitando la corrupción y la demagogia. Por lo que llamó muchísimo la atención las palabras del presidente electo López Obrador al decir que a los centroamericanos que forman parte de la caravana, aquí se les dará trabajo. Si un gran número de mexicanos, es exactamente de lo que carecen, de un empleo. La visa de trabajo que les está ofreciendo el Presidente Electo de México a los migrantes centroamericanos que logren entrar al país, a partir del próximo 1 de diciembre, desde el punto de vista humanitario nos hace ver como nación muy bien a nivel internacional, así como también a la administración federal que está por entrar, pero al interior de México cuál será el costo que tendremos que pagar, en cuanto a los millones de connacionales que carecen de trabajo, que no tienen una forma honesta de llevar el sustento a sus familias. Lógicamente que el precio será muy alto, tanto para el país como para los paisanos que viven está difícil situación.
El problema de los migrantes centroamericanos es muy grave para cada uno de ellos, lo sabemos, vienen huyendo de la delincuencia que se vive en sus países, de la pobreza, de la falta de empleos, situaciones de la que son culpables sus gobiernos y por lo tanto el resolverlos corresponde a éstos y aunque al leer esto suene muy duro, no corresponde a gobiernos de otras naciones resolverlos, cada país tiene que resolver primero los problemas que tiene y posteriormente ayudar a los demás.
Un ejemplo claro de lo citado, lo vivimos nosotros desde hace muchos años con la Nación más poderosa del mundo. El problema de la migración mexicana hacia el vecino país del norte, tiene su origen aquí, por las corruptas administraciones que hemos tenido y de alguna forma queremos que la solución se dé en la Unión Americana. Esta se debe dar aquí.
Así pues tenemos una posición de gran controversia en cuanto a los migrantes centroamericanos, que esperemos pueda solucionarse de la mejor manera posible para todos, ellos y nosotros. Usted qué OPINA estimado lector. Hasta el miércoles. noti-sigloxxi@nullhotmail.com (Fech. Púb. Lun. 22-octubre-18)