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La Jornada
Representantes de ciudadanos ucranios residentes en México, pidieron apoyo para todos los refugiados. Foto Marco Pelaez

Un grupo de ciudadanas ucranias acudió este jueves a la Cámara de Diputados para solicitarle ayuda humanitaria al gobierno y la sociedad de México, incluidas visas de entrada al país, con el objetivo de superar los estragos que ha causado la invasión de Rusia a su país, especialmente a la población civil.

En conferencia de prensa, una de las manifestantes –que se identificó como Martha Corein, piloto de rescate— hizo un llamado a la población mexicana a solidarizarse con todas las personas que están sufriendo por las acciones militares de Rusia.

“Hoy le pedimos a ustedes, mexicanos, que nos ayuden. Ayúdennos con medicinas, con víveres. Ayúdennos a conseguir visas humanitarias para todos los refugiados ucranianos”, enfatizó la mujer.

De acuerdo con la ciudadana ucraniana, algunos de los implementos que más necesita la población civil de su país en este momento son: medicinas, sistemas de transfusión de sangre hospitalarios, sistemas de acceso intraóseo, torniquetes para sangrado pélvico, férulas pélvicas y dispositivos de intubación.

Asimismo, indico que en el país de Europa oriental hacen falta ropa, calzado para hombres, mujeres y niños, mantas o edredones, sábanas, alimentos, agua potable, sillas de rueda para adultos y niños, muletas, camillas para hospitales, “y lo más importante, botiquines de primeros auxilio”.

Luego de destacar que los ucranios residentes en México han creado un canal de noticias en español para informar a la población del país sobre lo que está ocurriendo con la invasión rusa, la mujer indicó que la ayuda humanitaria puede ser llevada al restaurante “Ona”, ubicado en la colonia Polanco, así como a domicilios particulares cuya ubicación se dará a conocer después.

Por su parte, otra de las manifestantes ucranianas, de nombre Elena, lamentó que “tenemos la mala suerte de que el líder de nuestros vecinos (en referencia al presidente ruso Vladimir Putin) cree que puede robarnos nuestra historia porque le conviene para seguir con su vida corrupta.

“Nada me hace tan feliz como ver a los diputados del Congreso de México ayudándonos, porque me hacen sentir como en casa. Desde el primer día, la población mexicana me ha hecho sentir parte de ellos. Mi corazón es mexicano, pero soy ucraniana a mucha honra, y con el apoyo de México, le digo a todo el planeta que Ucrania llegó al mundo moderno para quedarse”.