La contienda presidencial se mantiene ajustada en los estados clave, mientras ambos candidatos buscan captar votantes latinos y jóvenes en los últimos días de campaña.
Kamala Harris, candidata presidencial en la carrera estadunidense | Imagen de referencia | Foto: Agencias
Agencia EFE, Agencia AFP y Agencia Reuters.
Kamala Harris pidió a los estadunidenses que pasen página a Donald Trump, y lo hará desde el lugar donde el candidato republicano arengó a sus simpatizantes cuando era presidente antes de que atacaran el Capitolio el 6 de enero de 2021.
Donald Trump es «inestable», está «obsesionado con la venganza, consumido por el resentimiento y en busca de un poder sin control», acusó Kamala Harris en un discurso solemne ante decenas de miles de personas en Washington.
«Es hora de pasar página», afirmó este martes la candidata demócrata a la Casa Blanca en el lugar donde el republicano arengó a sus simpatizantes el 6 de enero de 2021.
La idea fue que la vicepresidenta y candidata demócrata a la Casa Blanca haga de fiscal, su antigua profesión, y el público de jurado.
Al sur de la verja de la Casa Blanca, en La Elipse, el parque donde se coloca el tradicional árbol de Navidad, Harris subrayará que su rival es «alguien totalmente absorbido por su infinito deseo de venganza» que no está interesado «en las necesidades del pueblo estadounidense», según su equipo de campaña.
La demócrata Kamala Harris dijo a decenas de miles de personas reunidas en Washington que la elección entre ella y su oponente es una elección entre la libertad y el caos.
Harris habló en un mitin al aire libre a más de 75 mil personas según su campaña, en el lugar cercano a la Casa Blanca donde el 6 de enero de 2021 Trump se dirigió a sus partidarios antes de que atacaran el Capitolio de Estados Unidos.
«Sabemos quién es Donald Trump», dijo Harris, añadiendo que el expresidente «envió una turba armada» al Capitolio de Estados Unidos en un intento de anular los resultados de las elecciones de 2020.
«Se trata de alguien inestable, obsesionado con la venganza, consumido por el agravio y en busca de poder sin control», dijo Harris durante el alegato final de su campaña.
Harris estaba flanqueada por banderas estadunidenses en el escenario y rodeada de pancartas azules y blancas que decían «LIBERTAD», con la Casa Blanca iluminada de fondo.
«El primer día al ser elegidos, Donald Trump caminará por esa oficina con una lista de enemigos, yo caminaré con una lista de cosas pendientes. Prioridades que haré por el pueblo americano y trabajaré con todos, republicanos, demócratas e independientes», dijo Harris.
Discurso patriótico de Kamala
Kamala promete poner a EU primero que todo
De igual forma, Kamala Harris prometió poner el país por encima del partido y de sus intereses y buscar soluciones de sentido común, a diferencia de su adversario, el ex mandatario republicano Donald Trump.
«Me comprometo a buscar puntos en común y soluciones de sentido común para mejorar su vida. No busco sumar puntos políticos. Estoy buscando progresar. Me comprometo a escuchar a los expertos, a aquellos que se verán afectados por las decisiones que tome y a quienes no están de acuerdo conmigo», dijo.
«Será diferente porque los desafíos son distintos. Nuestra prioridad como nación hace cuatro años era acabar con la pandemia y rescatar la economía. Ahora nuestro mayor reto es bajar los precios», dijo la demócrata.
Materia de migración
La de Trump es la migración. El republicano de 78 años acusa a los migrantes en situación irregular de todos los males del país, dice que «envenenan la sangre» de Estados Unidos y comen mascotas.
La migración ilegal en la frontera con México preocupa a los estadounidenses, aunque mucho menos que la economía, y Harris lo sabe.
Este martes prometió trabajar «con demócratas y republicanos para convertir en ley el proyecto de seguridad fronteriza que Donald Trump mató».
«Cuando sea presidenta, expulsaremos rápidamente a quienes lleguen aquí ilegalmente, procesaremos a los carteles y daremos a la patrulla fronteriza el apoyo que tanto necesita», añadió.
Pero «al mismo tiempo, debemos reconocer que somos una nación de migrantes», dijo la que puede convertirse en la primera mujer negra presidenta de Estados Unidos.
Se comprometió a trabajar con el Congreso para aprobar una reforma migratoria, que incluya un camino hacia la ciudadanía para migrantes como «los trabajadores agrícolas» y los «soñadores», aquellos que llegaron de niños a Estados Unidos.
«Si me dan la oportunidad de luchar en su nombre, no hay nada en el mundo que se interponga en mi camino», afirmó la vicepresidenta ante unas 75 mil personas, según estimaciones del equipo de campaña.
¿Qué sabemos del mitin de Trump?
El lugar elegido es muy simbólico. Allí fue donde Trump instó a sus seguidores a «luchar como demonios» en 2021. Acto seguido muchos fueron al Capitolio para interrumpir la certificación de la victoria de Joe Biden, en un asalto que dejó 140 policías heridos.
Cuando Harris entró en campaña en julio pisó fuerte el acelerador, permitiendo al partido levantar el ánimo y tomar la delantera en los sondeos nacionales, pero con el paso de las semanas la ventaja se ha erosionado.
Ahora están igualados en los sondeos, con empate técnico en los siete estados bisagra o pendulares que decidirán el resultado de las elecciones, en las que ya votaron más de 50 millones de personas por anticipado.
Trump se dio cita en Allentown, en Pensilvania, quizás el más importante de los estados bisagra y que cuenta con medio millón de puertorriqueños, furiosos con los republicanos desde que un humorista los insultó en un mitin diciendo que Puerto Rico es «una isla flotante de basura».
Este martes Trump calificó ese mitin de «festival de amor».
«Los políticos que llevan haciendo esto mucho tiempo -30 y 40 años- dijeron que nunca había habido un acto tan bonito. Fue como un festival de amor, un absoluto festival de amor, y fue un honor para mí participar», afirmó en un acto de campaña en su mansión de Florida.
Trump prometió «luchar como locos los próximos siete días».
«Vamos a salvar a Estados Unidos, no tenemos otra opción», afirmó, y acusó a su rival de contar «mentiras».
Trump se encuentra a la defensiva por las acusaciones de su exjefe de gabinete de la Casa Blanca, que asegura que encaja en la definición de fascista y que en el pasado elogió a Adolf Hitler.
El miedo a que se repita el caos de hace cuatro años y Trump vuelva a negarse a aceptar el resultado si pierde pesa mucho sobre las elecciones.
Por de pronto el republicano hizo su primera afirmación infundada de fraude electoral, alegando sin pruebas que ha habido irregularidades en Pensilvania.
«Realmente ‘cosas’ malas ¿QUÉ ESTÁ PASANDO EN PENSILVANIA???», cuestionó en la red social X.