La propuesta para que el propio Gobieno sea su propio revisor en cuanto a transparencia, acepte entregar información y determine él mismo cuáles datos se deben difundir «proactivamente», inaugura una nueva etapa de opacidad oficial, aseguran investigadores, autores de estrategias anticorrupción y ex-presidentas del INAI. «Entramos en una noche oscura de opacidad que nos va a tomar muchísimos años, si no es que varias décadas, recobrar el derecho que ya habíamos conquistado», aseguró la primera presidenta, en 2002, del Instituto Federal de Acceso a la Información Púbica (IFAI), antecdente del INAI, María Marván Laborde.. «El problema de fondo es que un Gobierno asuma que su función siempre es la del regulador y no la del sujeto obligado», señaló el director de la oficina en México de «Transparencia Internacional», con sede en Alemania, Eduardo Bohórquez. La nota es de Jorge Ricardo en «Reforma». Foto de Mario Jasso de Cuartoscuro.