Ricardo Anaya es un joven muy talentoso que ha venido a refrescar las filas del PAN. Cuenta además con el apoyo de Gustavo Madero y de Rafael Moreno Valle para llegar a la dirigencia nacional del blanquiazul. Pero antes tiene que ganar la elección interna y pasar la difícil prueba- en unos días- de un debate con su adversario, el senador Javier Corral, que en este aspecto es un «hueso difícil de roer». A ver si el queretano puede eludir las seguramente fuertes embestidas que a él y a su grupo político le lanzará el chihuahuense.