En el libro «El Jesuita», los periodistas argentinos Francesca Ambrogetti y Sergio Rubín describen a Jorge Mario Bergoglio como un amante de la música: «Me gusta el tango, lo bailé de joven», y fue en este ejercicio periodístico que el papa Francisco confesó su preferencia por Carlos Gardel, Julio Sosa y Adda Falcón. Es también un gran aficionado a los escritores argentinos como Jorge Luis Borges y Leopoldo Marechal, y al ruso Fedor Dostoieyski. Fue fumador empedernido y es asiduo a las pastas acompañadas con un buen estofado, las empanadas de carne y el dulce de leche. Lo publican en numero especial de «TV y Novelas».