Cuanto todo parecía que con la renovación del actual Organismo Público Local Electoral (antes IEV), llegarían una seria de cambios positivos en su estructura y funcionamiento, resulta que no, que en lugar de mejorar se empeoran diariamente las condiciones y actuaciones de los Consejeros Electorales.
Y no se trata de hacer leña del árbol caído ni mucho menos, pero si hay que recordar que todo empezó mal desde que inicio la renovación del consejo general, cuestionamientos directos pesaron en contra de varios de ellos, unos, derivados de su incompetencia, otros de sus relaciones directas con algunas siglas partidistas, en fin, bien dicen por ahí que lo que nace mal termina de ese mismo modo, mal.
Ya ante el paso del tiempo se vino el enorme desorden, desaseo y desconocimiento jurídico electoral, para elegir al secretario ejecutivo, primero, eligen a quien no cumple con los requisitos que marca la ley, el Señor Víctor Moctezuma Lobato, quien poco tiempo después y ante las impugnaciones en contra de su designación, fue destituido, según fallo del Tribunal Electoral de Veracruz por no tener buena reputación y no contar con los 5 años de antigüedad de su título profesional.
De ahí para acá, no han parado los desaciertos y desavenencias al interior y exterior del Organismo, una de las más recientes es nuevamente la remoción del que fungía como Secretario Ejecutivo del OPLE, el señor Héctor Alfredo Roa Morales, esto ante la impugnación que interpusieran los partidos políticos de acción nacional y de la revolución democrática, ante ello, la sala superior del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación, determino que el señor Roa se encuentra vinculado en franco apoyo hacia un partido político determinado, situación que la Ley Electoral no lo permite, y que en automático deja sin efecto su nombramiento.
Ahora nuevamente el Consejo General del OPLE se encuentra en la lupa de todos, debido a que recientemente se han adjudicado mediante una licitación pública nacional la adquisición de varias camionetas de lujo para que los señores consejeros puedan supervisar cómodamente el andar y buen funcionamiento del procesos electoral actual.
Verdaderamente de no creerse lo que sucede con estos seudo consejeros electorales, que cada día que pasa se encuentran más desacreditados y señalados de ignorantes de la ley y novatos electorales, por decir lo menos.
Si lo que se quiere en el Estado es instituciones y funcionarios acreditados, de buen perfil, probos, que tengan otra cara con la ciudadanía, que exista cercanía, transparencia y todas estas cosas de las que esta habida el ciudadano de a pie, pues estos amigos no son las mejores cartas.
En mi particular punto de vista, y con el objeto de establecer lo que líneas arriba se dijo, estos señores deberán de irse tan pronto pase la elección actual, el Instituto Nacional Electoral, deberá de tomar cartas en el asunto y definir, si hay elementos suficientes probatorios para remover a todo el consejo o solo a algunos de ellos, pero lo más importante es y seguirá siendo el enorme desprestigio que sigue acumulando este organismo ante el electorado veracruzano; lamentable y de pena ajena la actuación de quien se dice el árbitro electoral en Veracruz. Al tiempo. Correo electrónico: bernardobellizzia@nullhotmail.com