Una de las formas de hacer y formar ciudadanía es la información. Mientras más informados estemos, más sabremos argumentar sobre la situación social y políticas públicas. De esta manera podremos estructurar argumentos que nos permita compartir con el resto de la población nuestro punto de vista, dónde estamos parados y a dónde queremos ir. Vamos, es dejar de lado la consigna fácil, para llegar a la idea.

Una victoria ciudadana obtenida hace apenas unos años fue la obligatoriedad de los entes públicos de informar sobre sus gastos y actividades. Recordarán que mediante este mecanismo legal se supo hace 14 años que Vicente Fox utilizaba toallas de cinco mil pesos cada una. Eso alertó a varias instancias de Gobierno y dependencias que, casi en automático, empezaron a “reservar” cierta información clasificada como confidencial.

Esto se ha vuelto un jaloneo entre quienes solicitan información y quienes –aunque obligados– ponen trabas de toda índole. Un ejemplo: cobrar las fotocopias a precios inaccesibles para el solicitante, si consideramos que muchas veces la información es de varios cientos de páginas.

Si me permiten el símil, parece que los diputados del país y del Congreso de la Unión practican una especie de “lucha libre”, donde para cada llave hay una contrallave. Es decir: cada vez que se hace una Ley o reglamento se dejan resquicios para evadirlos.

Aunque también debo anotar que buena parte de la sociedad no utiliza los mecanismos instrumentados para acceder a la información. Digamos que en términos generales somos una población desinformada que sólo obtiene referencias de las realidades mediante el prisma de las empresas de la comunicación. Así, cada uno dice lo que de acuerdo con su “fuente” parece “verdad”.

De ahí que deban apreciarse los esfuerzos institucionales, como el que realizan en este momento el Instituto Veracruzano de Acceso a la Información (IVAI) y la Secretaría de Fiscalización del Congreso del Estado, para trabajar coordinadamente con los 212 ayuntamientos de la entidad. Se trata de firmar convenios en relación con las responsabilidades que deben cumplir en materia de transparencia, rendición de cuentas y protección de datos personales.

Mediante comunicado oficial del Congreso, se da a conocer los tres ejes rectores que catapultarán el trabajo y esfuerzo conjunto:

“Primero, el Instituto dará a conocer al Congreso las responsabilidades de los ayuntamientos en materia de transparencia, y la Secretaría de Fiscalización informará al IVAI respecto de las obligaciones financieras y técnicas que deben presentar las autoridades municipales a esta Soberanía.”

“Segundo, ambas instancias asesorarán a los ayuntamientos en aquello que deben cumplir como entes fiscalizables y sujetos obligados, y se dará capacitación conjunta a las autoridades municipales bajo dos modalidades: en la capital del estado y por regiones.”

“Tercero, a solicitud del IVAI, en el sitio web legisver.gob.mx el Congreso del Estado difundirá los acuerdos o mensajes del Instituto, que estarán a disposición de las autoridades municipales, como fuente de información permanente.”

Pero toda esta labor será inútil, si no utilizamos los caminos que la ley permite. Considero que debemos dar el siguiente paso, y “con los pelos de la burra en la mano”, poder decir de qué color es.

Por hoy es todo. Le deseo un excelente día y nos leemos en la próxima entrega