Vamos para diez días de campaña (¡faltan 50!) y las críticas hacia los candidatos se concentran en diatribas, acusaciones balines, llamaradas de petate, en aras de atraer los reflectores y atención de los ciudadanos, o al menos de un sector que se adentra en las redes sociales o se sumerge en la lectura de los diarios.
Las críticas se concentran en gran parte contra los candidatos priistas, que parece son los rivales a vencer en la mayoría de los distritos.
Las críticas por lo regular son en dos vertientes: La de los candidatos llamados de “oposición” (a excepción de los aliados del PRI como Nueva Alianza, Verde y PRD); y la de los antipriistas o en un caso extremo, anticandidatos.
Se entiende la posición de los candidatos que critican a los otros candidatos. Al igual que los priistas ¿qué puede prometer un candidato a diputado federal del partido que sea? ¿legislar sobre un tema en particular? ¿Gestoría de apoyos, recursos? ¿Velar por los intereses ciudadanos? ¿Leyes en favor del desarrollo económico de su distrito? Agregue las que haya oído, leído o visto en los candidatos de cualquier partido… simplemente el ciudadano no entiende de esas propuestas o no le interesan.
Sí, es evidente que por eso, aunado a las nuevas disposiciones políticas-electorales, los candidatos buscan convencer a la gente de manera directa, caminando calles, recorriendo colonias y gastando suelas.
Pero mientras está eso, ahí les van algunas críticas contra algunos candidatos, se insiste, la mayoría contra el PRI, con o sin razón:
* La del día: Erick Lagos Hernández, responsable del incendio a la casa de campaña de la candidata a diputada de Morena, por el distrito de Acayucan. Y el candidato por Xalapa urbano, Cuitláhuac García, aprovechando el burro, agarra viaje para hacer una declaración con lugar común: “seguridad para todos los candidatos”.
* La de lavadero: Lilian Zepahua, con algunos meses de embarazo, a quien le buscan papá a la criatura de sus entrañas…
* La del golpe mediático: Perredistas apoyando a Alberto Silva, y Rogelio Franco haciendo su show… las encuestas marcan que, con o sin perredistas, el Cisne gana. El asunto es saber por cuántos votos.
* La ortográfica: El “Yunez” de Elizabeth Moralez, y otro llerro al inisio de su campaña…
* La edad de Garcimarrero: Que ya no aguanta a sus 75 años una campaña… dijeran por allí: ¿Lo quieren para semental o legislar?
* El Notario de Anilú: ¿Alguien de sus críticos entiende el papel de un Notario?
* El humor de Julio Saldaña: “No soy comparsa de nadie”… ¡claro! Nomás del PRI.
* Los drones de Spinoso: Sus promocionales por aire… ¿nadie le dijo que esta campaña es por tierra? ¡Ah! ¡Se va a ensuciar!
* La Potra desbocada: Isabel Morales Aguirre, candidata del PRD por Mina, en misa evangélica, bailando y clamando Aleluya… para los que no profesan esa religión, parecía que estaba poseída por el chamuco.
* El mural de Mota: Una pared pintada con photoshop hizo bulla en las redes sociales, donde le decían “Ganso” al candidato.
* El carácter de Noemí: Agradecen la candidatura de Guzmán Lagunes porque ya le cambió el carácter… anda muy sonriente. Por supuesto, los que agradecen son los de Protección Civil.
* Confusiones: Que Miguel Ángel Sedas Castro se parece al luchador Brazo de Plata, mejor conocido como “Super Porky”.
* Amarilla para Kuri: Por andar paseando a “sus” Tiburones Rojos del Veracruz por Orizaba… es que cuando quiere, son suyos; cuando se trata de pagar, los niega.
* El single de Tarek: La canción de “Happy” promocionando al candidato. Tan lamentable la letra como el baile de Tarek…

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