A veces pareciera que la ola de ataques contra equis o ye candidato no tiene más sentido o significado que el temor que tienen sus contrincantes porque ya no lo alcancen a casi una semana de la elección. Dije: “Pareciera…”
Así, es común que lleguen a la bandeja de mi correo asuntos de algunos candidatos que van de lo legaloide a la moralina.
Es normal en esta época electoral que ha pasado a ser una guerra de lodo. Acusaciones, señalamientos, vituperios, todo con tal de minar al rival que por lo regular va a la cabeza de las preferencias electorales…
II
Hubo un caso singular hace una semana, donde me enviaban la supuesta conversación entre un candidato del PAN con una dama que se supone ¡era su amante! ¡Sí! ¡Su amante! ¿Cómo? ¿un panista?
El mensaje a medias lo leí… paró en mi bote de basura electrónico. En lo particular, la vida privada en esos avatares de un político (en este caso un candidato), poco me interesa.
Calculo que la intención es disminuir el efecto positivo de la candidatura panista contra la del Verde.
Y conste, no es el único caso…
III
En anterior ocasión, igual me llega la información del padre de un candidato de Morena y su doble vida y por ende, su doble moral.
De las cosas que uno se entera: ¡Hasta vecino ocasional resultó! Por circunstancias propias de mis andares por el barrio, ya lo había visto, pero en mi inocencia, pensaba que visitaba a su nieto… es más, todavía creo hasta la fecha que así lo hace…
Aquí, lo que se me hizo raro fue la información, pues poco he visto al candidato de Morena y la única promoción que he observado es en la camioneta de su padre, cuando llega de visita.
IV
El último caso me llegó por vía indirecta. La indignación de una amiga porque una candidata era víctima de una extorsión por “periodistas” que tenían información de su preferencia sexual.
Sí, ¡terrible! que conste, no la preferencia sexual de la candidata, sino de la actuación de “Periodistas” que ven “oportunidades” para medrar en un malentendido ejercicio del periodismo.
Y también, me resulta raro el ataque contra la candidata porque las preferencias (electorales, que no sexuales), no la posicionan como favorita.
V
Como sea, en estos tres casos, en estos tres distritos, sólo el panista tiene los momios a favor y se entiende el ataque… tal pareciera que el resto de los chismes no tienen más intención que chingar por chingar aunque, faltando menos de diez días, tenga por seguro que más basura, como la que le apareció a Magno Garcimarrero Ochoa en su “feisbuc”, ha de arreciar en el cierre de estas campañas que se han caracterizado por más lodo que propuestas.

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