Hasta enero del 2016 podría iniciar la verificación vehicular en su modalidad dinámica cuando pudo haber iniciado el pasado primero de julio… mientras, se podría hablar de pérdida de tiempo… y de contaminación.

Me cuenta la mujer que un señor se quejaba de que actualmente, sale más caro a una persona que cumple con la verificación cada seis meses ($200), que alguien que por 750 pesos, acude a uno y resuelve su problema (o su desidia) que viene arrastrando ¡hasta por tres años!

No se generaliza, pero los centros de verificación en el fidelato fueron convertidos en negocios donde se pueden adquirir actualmente hologramas y nada más.

II

Hay quienes piensan que esto de la “nueva” verificación tiene que ver con una ocurrencia recaudatoria… el asunto es más alarmante… tiene que ver con un problema de contaminación que raya en el incremento de enfermedades bronco-respiratorias y de mortalidad.

Hace más de cuatro años, la calidad del aire no era tomada en cuenta… es más, al inicio de esta administración estatal, llegaron 40 personas a las que al cierre del fidelismo, les “dieron” la concesión de verificentros… no se las permitieron.

La política implementada en la calidad del aire en Veracruz se basaba en pasar los carros a verificación y cobrar. No había un diagnóstico de cómo estaba el aire, no había monitoreo ni medidas en nuestra ciudad ni instrumentos de gestión… es hasta 2011 que inician estudios en la calidad del aire en tres puntos: Xalapa, Córdoba y Coatzacoalcos. La primera, por el increíble número de unidades circulando por la ciudad; la segunda, por su cercanía a los ingenios azucareros; la tercera, por su industria. Los resultados alarmaron a las autoridades.

III

Veracruz apareció entre los cinco estados que más emana(ba)n contaminantes al aire como partículas de metales, de hidrocarburos, de azufre, de amoniaco. El 36 por ciento de dicha contaminación proviene de unidades automotoras; el 28%, de las industrias; 22%, de las quemas como de caña y el resto, en fuentes naturales.

Las zonas bajo observación son Xalapa y Minatitlán, en donde ya se monitorea el aire; en Poza Rica e Ixtaczoquitlán ya se calibran las estaciones de monitoreo; en el Puerto jarocho, están en construcción, y en Tuxpan, está en planeación pero con urgencia, pues es una de las zonas más contaminantes.

IV

¿Quién no se ha encontrado con un camión del servicio urbano arrojando enormes humaredas? La Ley no les pedía verificación. Cuenta Quirino Moreno que cuando gobernaba Dante Delgado, se ordenó pasar a todo el servicio urbano a chequeo y los transportistas se rebelaron haciendo un paro de labores durante una visita a Veracruz de la señora Cecilia Occelli de Salinas. Para mediar, se les retiró a éstos la obligación de verificar sus unidades y sólo adaptarían un equipo al escape que disminuyera las emisiones contaminantes… sí, algunos lo hicieron como para taparle el ojo al macho. Hoy, la disposición es que no haya excepción para nadie. Lo esperamos…

V

¿Y por qué hasta enero 2016 esperar? ¡Ah! porque algunos concesionarios de los llamados Centros de Verificación interpusieron un amparo porque consideraban que se atentaba contra sus derechos… los Juzgados han resuelto un 70 por ciento de éstos y qué creen… se los han negado porque las autoridades judiciales consideran que por encima del interés particular de los quejosos, prevalece el bien común. Hay que citar que los nuevos verificentros se pusieron a concurso y sólo cinco de los concesionarios quejosos participaron y ganaron su nueva concesión… está de más decir el interés charro del diputado Renato Tronco por mantener a Veracruz, por seis meses más, sin reducir sus emisiones contaminantes… ya es mucho lo que contamina con sus ocurrencias de querer ser gobernador