«Por Andrés me la comí todita». Esa frase que pronuncié en aquél tiempo, no fue la más afortunada, pero en la vida como en la política uno es dueño de sus palabras y de su silencio. Lo que yo asumí fue la responsabilidad que me correspondía. Todo lo que he callado lo daré a conocer en 2018 o después del 2018, ya se tendrá un desenlace final de este asunto, ojalá Andrés Manuel sea Presidente, no lo sé… y si no lo es, de todos modos lo que yo diga o deje de decir, no influya en eso, sino que sea un sólo un testimonio que se apegue a la verdad». Es parte de lo que Bejarano le respondió a Edgar Escamilla para «La Jornada Veracruz» de Tulio Moreno, sobre aquel video dónde se le mostró recibiendo dinero y que le costó la cárcel durante algún tiempo.