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– Por ser un tema que no pasa de moda -la profesión de periodista- incluimos esta columna de Pascal Beltrán del Río, del periódico capitalino Excélsior en su espacio Bitácora del director, con el título de «Noticia».
Aunque no es muy apreciada por los adictos a las historietas, la película «Superman regresa» (2006) de Bryan Singer, contiene una de las más interesantes metáforas sobre la naturaleza del oficio periodístico.
Cito de memoria, con el riesgo de que algún especialista en el personaje corrija algún detalle: Superman ha estado ausente de la Tierra durante varios años y la reportera Luisa Lane escribió un artículo ganador del Pulitzer, en el que reflexiona por qué la humanidad no necesita a este héroe.
De pronto, el villano Lex Luthor ejecuta un experimento subterráneo con el que genera un enorme impulso electromagnético, que a su vez causa un apagón en toda Metrópolis. El desperfecto afecta el avión, en el que Luisa realiza una cobertura, provocando su caída.
Superman reaparece para rescatar a la reportera Lane, logra detener la caída del avión y lo deposita en un estadio de beisbol, donde se hubiera impactado de no haber aparecido el superhéroe.
En la redacción del periódico El Planeta, el director Pedro Blanco llamó a junta general en la que pidió la mejor fotografía y dio las órdenes de información a todos los encargados:
Deportes debía averiguar cómo sacarán el avión del estadio; a Viajes, le encargó indagar a dónde fue Superman de vacaciones; Sociales y Moda investigarían si conoció a alguien y si su traje era nuevo; la fuente Financiera cotejaría si su irrupción afectaría a la Bolsa, mientras que los periodistas de Política sondearían si Superman aún cree en la verdad y la justicia.
Luisa Lane ya traía muy bien reporteado el asunto que consideró más importante: el impulso electromagnético que descompuso redes de luz que causaron a su vez un efecto catastrófico en Metrópolis y suspendió el funcionamiento de todos los aparatos electrónicos de la Costa Este.
Su jefe la reprendió y la llamó a su oficina, no sin antes gritar a toda la redacción: “¡La noticia no es el apagón, es Superman!”. Ya a solas, le recetó su credo: “Luisa, tres cosas venden periódicos: tragedia, sexo y Superman. La gente está harta de tragedias, tú no sabes escribir sobre sexo, lo que significa que sólo queda Superman y tú lo sabes”.
La anécdota simboliza la relación dialéctica a la que se enfrentan los profesionales de la información todos los días, sobre todo cuando en los años recientes se ha incrementado el debate sobre la deontología del trabajo periodístico, los valores a los que debe servir y los intereses sociales que deben motivar su actuación.
En el relato de Singer, a ambos personajes les asiste la razón: desde la óptica de Luisa, era más importante el apagón por sus efectos perniciosos; pero en la decisión del editor pesó el hecho que consideró aún mucho más periodístico por ser más atractivo, comentable y, por supuesto, vendible.
Es natural que quienes no están familiarizados con el quehacer diario de una redacción, suelan tener sentimientos encontrados con este dilema.
Los periodistas podemos percibirlo con claridad ahora, gracias a que existen las redes sociales, que dan la oportunidad al lector de expresar sus opiniones.
Aunque muchas de ellas rechazan el criterio periodístico de dar más jerarquía a un hecho aparentemente menos importante que otro, ese cuestionamiento termina dando la razón a ese criterio.
Un ejemplo lo vimos recientemente en Facebook y Twitter, en el que muchos usuarios manifestaron su solidaridad con los franceses víctimas de la tragedia.
En numerosos casos, esta adhesión política fue censurada por otros usuarios, quienes denunciaron una doble moral por no haber expresado apoyo similar por el atentado ocurrido un día antes en Beirut.
La crítica se hizo extensiva a los medios de comunicación que, desde esa óptica, soslayaron la tragedia en Líbano para privilegiar los atentados en París.
Aquí es necesario subrayar que muchos medios del mundo reportamos el ataque en Líbano, sin que ello desatara reacciones en las redes como comprensiblemente sí las generó París.
¿Hay que culpar a la gente de que le importe más una ciudad que otra? Yo creo que no. Se trata simplemente de un dilema periodístico, que no se propone resolver nada. Al final, el problema de fondo es atacar la violencia irracional, se genere donde se genere.
CHILEATOLE DE LENGUA
– Un reportero de la cadena British Broadcasting Corporation (BBC) tuvo que suspender su enlace en directo desde París, debido a lo conmovido que estaba.
El reportero Graham Satchell informaba en vivo desde la Plaza de la República, que se ha convertido en un inmenso memorial improvisado dedicado a las víctimas de los ataques terroristas del pasado viernes 13, pero la emoción le impidió continuar.
Satchell, padre de tres hijos, se refería al sentimiento de esperanza entre los parisinos tras la oleada de atentados, cuando, de repente, agachó el rostro, hizo una pausa y decidió terminar con su intervención.
En el estudio, los conductores disculparon a su colega y continuaron con la transmisión.
Poco después de su fallido enlace, Satchell escribió un mensaje en su red social Twitter, en el que expresó su agradecimiento por el apoyo recibido.
– El miércoles 18 del revolucionario noviembre, en conocido hotel del centro xalapeño, el aspirante panista a la gubernatura de Veracruz, Juan Bueno Torio, ofreció un desayuno a representantes de medios de comunicación.
Señaló que no existe división al interior del PAN veracruzano. Que no hay nada definido en cuanto a la candidatura. Que él va hasta las últimas consecuencias.
Bueno Torio también dijo a los ‘tundeteclas’ de Xalapa que es el único que le ha ganado dos veces al PRI y que el control de la nominación la tiene el CEN del blanquiazul, pero que debe tomar en cuenta lo que piensa la militancia del PAN en la entidad.
– El próximo miércoles 2 del guadalupano diciembre, el titular de la CGCS, Juan Octavio Pavón González, acudirá al Congreso del Estado para informar ante la comisión de Gobernación las actividades realizadas en el año por la dependencia a su cargo.
– Este lunes 23 de noviembre, en el aula «Ernesto Meneses» de la Universidad Iberoamericana (UIA) en la ciudad de México, el ex vocero presidencial durante la administración de Vicente Fox Quezada, Rubén Aguilar Valenzuela presentó, junto con Yolanda Meyenberg, el libro «La Comunicación Presidencial en México 1988-2012».
Como es sabido, Aguilar Valenzuela es egresado de la UIA y colabora actualmente en varios medios impresos y electrónicos -como el diario digital Crónica del Poder- con su columna «Mis cuadernos», donde aborda temas cotidianos de interés
– Previo al informe del presidente magistrado Alberto Sosa Hernández, del Tribunal Superior de Justicia, este jueves 19, un empleado empujó a los reporteros que entrevistaban a la secretaria ejecutiva de la CEAPP, Namiko Matzumoto Benítez, por lo que ella le pidió que permitiera a los comunicadores xalapeños hacer su labor.
– En su leída columna «Mira política», la dinámica comunicadora norveracruzana Lupita Mar hizo este comentario en el periódico en línea Al Calor Político:
El periodista Francisco Morales Cortés, candidato a Rey de Carnaval de Veracruz 2016, renunció a su aspiración luego de observar algunas preferencias hacia el factor económico, alejándose de lo que es el espíritu de las fiestas carnestolendas.
El otro candidato a su horrorosa majestad, el boxeador Tomas “El Gusano” Rojas, llegó con fuertes “padrinos”, manejando grandes cantidades de dinero.
Cabe mencionar que “Paco” Morales mantenía apoyando su causa a un grupo fuerte de la sociedad civil, el cual trabajaba desde el boteo hasta la presentación de artistas locales, los cuales le brindaban su apoyo para que a través de sus presentaciones, pudiera conseguir recursos económicos que le permitieran captar un mayor número de votos.
En una actitud digna, el comunicador especializado en periodismo cultural decidió que a su retiro de la contienda donaría lo captado hasta el momento, a tres diferentes organizaciones de apoyo a los que menos tienen.
– El domingo 15 de este mes, el periódico Gráfico de Xalapa celebró su aniversario 35, pues como se recuerda fue fundado en 1980 por el tenaz José Luis Poceros Domínguez.
Ya consolidado como medio informativo capitalino, en la actualidad Gráfico tiene varias ediciones regionales en varias ciudades veracruzanas, como Martínez de la Torre y Coatzacoalcos.
– En su gustado espacio «Diario de un reportero», el comunicador misanteco Miguel Molina Chacón publicó hace poco en el bisemanario Punto y Aparte, editado en Xalapa por su paisano Froylán Flores Cancela, esta anécdota:
Fue a principios de los noventa. El Centro de Estudios Interamericanos y Fronterizos de la Universidad de Texas en El Paso, invitaba con frecuencia a personajes de la política mexicana, y yo -que era corresponsal de la agencia informativa Notimex- terminaba entrevistándolos.
Hablé con Cuauhtémoc Cárdenas; varias veces entrevisté a Porfirio Muñoz Ledo; conocí a Santiago Oñate; escuché a Elba Esther Gordillo y cuestioné a un joven político del equipo de Luis Donaldo Colosio, sobre las bondades del sistema priista y la evidente incapacidad del partido para ofrecer e instrumentar políticas que sirvieran a los mexicanos.
El joven político priista me respondió a medias, con lugares comunes y sin ganas. La entrevista fue un asunto mediocre. Al llegar a mi casa, que era al mismo tiempo mi oficina, recibí una llamada de México: Miguel Ángel Velázquez, director de Información Nacional en la agencia, me preguntó qué le había hecho al joven político.
Nada, le dije; le hice una entrevista, porque vino a hablar sobre el sistema político mexicano. Pues el joven político priista llamó muy molesto al director de Notimex, Rubén Álvarez Mendiola, para reclamarle que el corresponsal hacía preguntas muy críticas. Hablé con Rubén y le conté cómo había estado la conversación con el joven político. Le dio risa.
El joven político priísta era Agustín Basave, ahora presidente nacional del Partido de la Revolución Democrática.
– La sección “Rozones”, del periódico capitalino La Razón, comentó hace poco que “la que ya tiene preparada su 57 Semana, del 23 al 25 de noviembre, es la Cámara de la Industria de la Radio y Televisión, que agrupa a los concesionarios de los medios audiovisuales de comunicación en México.
“Interesante además que el tema a debatir sea la libertad de expresión y que tenga invitados del más alto nivel: Peña Nieto, Osorio Chong, Videgaray, Ruiz Esparza, Nuño, Beltrones, Anaya, Basave y muchos más».
– Con altanería, la directora de Comunicación Social del OPLE, Liz Mariana Bravo Flores, acusa de hurto a todo el personal de su área, debido a un supuesto robo de 6,500 pesos del interior de su oficina.
Según nota informativa de Claudia Montero, reportera del periódico en línea Al Calor político, este incidente generó incomodidad en el personal del área de Comunicación Social y por ello, piden la intervención del consejero presidente, Alejandro Bonilla Bonilla, para que el caso se turne a las autoridades legales correspondientes, a nivel interno y externo, para que se deslinden responsabilidades.
A un mes de que fuera designada como directora del área de prensa del OPLE, la titular ya tiene una queja formal ante la presidencia del Órgano Local y con copia a cada uno de los consejeros electorales, esto debido a que acusó de hurto a todo el personal del área de Comunicación Social del organismo, además de que los amenazó con interponer una denuncia en su contra ante la Fiscalía General del Estado.
Todos los empleados del área de prensa firmaron un documento donde piden a Bonilla Bonilla, que la engreída titular Liz Mariana los trate con respeto, diligencia, imparcialidad y rectitud, tal como lo marca la Ley de Responsabilidades de Servidores Públicos en su artículo 146.
¿QUÉ PASA AHÍ?
– Lo que debió ser una revisión del proyecto de una Radio Comunitaria en el municipio de Omealca por parte de elementos federales, terminó en decomiso del equipo y cárcel por haber firmado un documento en lugar de su padre.
Alma Delia Olivares, entrevistada por el reportero Benito Juárez Ramírez, corresponsal del periódico en línea Al Calor Político, expresó que a tres años de este caso aún vive esa pesadilla, porque los daños colaterales le han afectado económica, psicológicamente y en su profesión, porque le han cerrado las puertas donde ha buscado desempeñarse como licenciada en Turismo, por no contar con su carta de no antecedentes penales.
Hoy, sigue el proceso por un error del abogado defensor; de no presentar las pruebas, corre el riego de ser privada nuevamente de su libertad condicional, expresa Alma Delia, quien vive momentos de angustia.
Esta mujer explica que en el 2010, la historia empieza con su padre –una persona que fue alcalde de Omealca, bastante emprendedor- viendo que en este municipio enclavado en la sierra de Tezonapa, colindante con Zongolica, aún carecen de una radio.
Buscando elevar la cultura y el entretenimiento, puso en marcha este proyecto de radio comunitaria, “que fue un intento, porque se quedó en pruebas para ser una radio comunitaria”.
En esta tierra -en donde surgió el legendario cacique Toribio Gargallo- era urgente cambiar esa imagen; pero además, mejorar la intercomunicación en esta sociedad.
Por ello, con recursos propios, en 2010 el ex munícipe omealquense adquirió un pequeño equipo para iniciar transmisiones, apoyado en su hija, a quien le dijo que se esperaban tiempos difíciles.
No obstante, invitaron a jóvenes inquietos que bajo un programa y perfil meramente comunitario, transmitían programas infantiles, culturales, entrevistas con gente del campo y ahí se anunciaban los festejos y onomásticos de la gente.
La idea era informar de lo que sucedía en esta población para mantenerla comunicada; mientras duró, mantuvo interesada a una parte del pueblo de Omealca.
Asegura que mientras este proyecto estuvo funcionando, se integró un grupo cultural que presentaban comedia, bailes y otras acciones con la participación de jóvenes altruistas, que buscaban elevar la cultura de más jóvenes, para erradicar un tanto la violencia que se vive en esta zona.
Sin embargo, el 14 de marzo de 2010 llegó un grupo de policías federales supuestamente a una inspección de esta radiodifusora; «al final, nos trataron como a delincuentes o peor, porque a éstos los tratan con mucho respeto; pero aquí violaron nuestras garantías individuales.