La inminente llegada de la empresa Uber en Argentina provocó la movilización del gremio de taxistas de Buenos Aires, que ya anticipa jornadas para declararse en estado de alerta para impedir que este nuevo servicio de transporte opere en el país.
Omar Viviani, secretario general del Sindicato de Taxis de Buenos Aires, advirtió que “no dejaremos que Uber se instale bajo ningún concepto, no lo vamos a permitir”.
Viviani afirmó que el servicio que ofrece Uber, que se basa en una aplicación telefónica, no es necesario en la capital argentina porque ya hay empresas de radiotaxi con ofertas similares.
Agregó que el 6 de abril, los 35 mil taxistas afiliados a este gremio comenzarán jornadas para declararse en estado de alerta y movilización porque la operación de Uber afectará sus fuentes de empleo.
Como parte de su estrategia de resistencia, los taxistas elaborarán un proyecto de ley que prohíba de manera explícita el servicio de transporte de pasajeros únicamente a través de una aplicación.
Además, solicitarán una reunión con el ministro de Transporte, Guillermo Dietrich, para explicarle los inconvenientes que traería Uber, ya que desequilibraría por completo el servicio de pasajeros en la ciudad.
Pese a los reclamos anticipados de Viviani, Uber ya logró que, a partir de esta semana, los usuarios que así lo deseen puedan descargar la aplicación para solicitar su vehículo.
También comenzó a reclutar a taxistas, quienes para ser contratados deben cumplir con requisitos como tener licencias de conducir vigente, ser mayor de 21 años, permisos de tránsito actualizados, seguros de vehículo y certificado de antecedentes penales.
El vehículo con el que ofrecerán el servicio deberá ser un modelo de 2009 en adelante, de cuatro puertas, con espacio para valijas, aire acondicionado y en buen estado.