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Agencia Imagen del Golfo

Ante el aumento en los montos de créditos que ofrecen financieras y otros entes crediticios, un promedio de 40 familias en la zona tienen deudas por una cantidad cercana al millón de pesos, situación que es muy grave, alertó David González Rojas, delegado de la Unión Zapatista en Apoyo a Deudores en el estado.

Consideró una irresponsabilidad por parte de esas empresas crediticias el que se otorguen montos hasta de 30 mil pesos a las personas sin que se haya llevado a cabo una investigación para ver si son solventes, si hay algún aval y sin que muchas veces la gente lea bien el contrato, pues sólo les guía el afán de lucro.

“La gente firma y no sabe ni lo que está firmando. De cada diez personas, diez están pagando algún crédito”, señaló.

González Rojas dijo que la gente deja de pagar porque no puede hacerlo, no porque no quiera.

Señaló que es preocupante para la Uzade esta situación, y más preocupante aún que eso ya se esté dando en la zona indígena.

Refirió que en un corte reciente se integró un padrón de unas 40 personas que deben cerca de un millón de pesos, de los que la mitad es por capital y el resto por intereses.

Agregó que ante la necesidad de dinero de la gente, hay casas de empeño que indican que todo lo que entre por sus puertas lo aceptan, y antes eran las alhajas y ahora los celulares y los electrodomésticos.

Señaló que la gente está sufriendo un saqueo y lo que gana se lo están comiendo en intereses porque ya no tienen cómo pagar, porque los intereses van del 100 al 140 por ciento, con esos “mentados pagos chiquitos” que se vuelven eternos.

Indicó que las autoridades, ya que no tienen la capacidad para generar salarios dignos y fuentes de empleo, al menos deben amparar con leyes a la población para que no sean objeto de acoso y pierdan su patrimonio.