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Agencia Imagen del Golfo

Pobladores de la congregación El Chapo, perteneciente al municipio Ixhuatlán del Sureste, expresan preocupación debido a los altos niveles de contaminación al que durante muchos años han estado expuestos, de lo que aseguran ha provocado múltiples enfermedades entre la ciudadanía.

A decir de la señora Juana Méndez Macneally, al menos 8 habitantes de la localidad están padeciendo cáncer de mama, garganta y matriz. Al menos 6 personas han fallecido derivado de la enfermedad, ya que no cuentan con los recursos necesarios para costear el tratamiento.

Señaló que hace 13 años atravesó luchó por salvar su vida, luego que le detectaran cáncer de matriz, al no recibir apoyo alguno de dependencias de gobierno y mucho menos de la empresa para la que trabajaba, tuvo que iniciar la venta de muchas de sus pertenecías, ya que el tratamiento resultaba costoso.

Dijo que para poder salvar la vida realizó gasto superior a un millón de pesos, por lo que explicó varias personas han fallecido, ya que no reciben el apoyo de nadie y al no tener los recursos suficientes para afrontar la enfermedad, únicamente les queda esperar la muerte.

AUTORIDADES DE SALUD SE HACEN DE LA “VISTA GORDA”

Méndez Macneally señaló que la contaminación en la congregación esta a la vista de todos, incluso de las autoridades de salud, pero estas pese a las constantes quejas de la población no hacen nada por sancionar a las empresas que contaminan.

Tal es el caso de un conocido arroyo que atraviesa la localidad, en este afluente las empresas como Prodexa y Bachoco vierten algunos residuos, provocando que el agua se torne de color negro y despida fétido olor.

Señaló que en más de una ocasión ha arribado personal de salud, para realizar supervisiones en el arroyo, aunque la contaminación es evidente para ellos no pasa “nada”, lo que hace pensar que estos tienen arreglos con los directivos de las empresas para que no surjan sanciones.

Dijo que a ellos de los supuestos estudios que realiza personal de salud, no son informados, y hasta el momento la situación no cambia, ya que los niveles de contaminación van en incremento.

Diariamente respiran olores que afectan la salud de las personas provocando enfermedades de garganta, irritación en los ojos y otros malestares, los cuales no son tomados con seriedad por parte de los directivos de las empresas y mucho menos por el sector salud.