• En el auditorio Sebastián Lerdo de Tejada, del Congreso del Estado, amigos, familiares, servidores públicos y representantes de distintos sectores se reúnen para recordar y reconocer su legado, a invitación de la UPAV.
“Guillermo Zúñiga Martínez nunca supo de medianías ni de reservas cuando de Veracruz y de su gente se trató”. Con estas palabras inició la presentación del libro Guillermo H. Zúñiga: un hombre de palabra. In memoriam, como parte del homenaje que la sociedad xalapeña rinde al maestro, en su primer aniversario luctuoso, a invitación de la Universidad Popular Autónoma de Veracruz.
En el auditorio Sebastián Lerdo de Tejada del Palacio Legislativo, autoridades estatales y académicas, exservisores públicos, personalidades y representantes de los ámbitos educativo, empresarial, artístico, literario y de los medios de comunicación, entre otros, se reunieron para recordar al maestro, al servidor público, al padre, al amigo, y su legado.
Ante la señora Guillermina Martínez de Zúñiga y sus hijos Anilú y Américo Zúñiga Martínez, alcalde de Xalapa, los presentadores refirieron fragmentos de esta obra, que reúne a distinguidas plumas que plasmaron sus experiencias al lado del hombre, a quien honran por su trayectoria y contribución a la vida académica y política de Veracruz.
La presentación corrió a cargo del Director de Diario de Xalapa, Víctor Murguía Velasco; del Director general del Colegio de Gobierno de la Universidad de Xalapa (UX), Enrique Mendoza Filidor y el Director general de Prevención de Riesgos de la Secretaría de Protección Civil del Gobierno del Estado, José Ferrer Rivera, colaboradores de esta obra.
El periodista Víctor Murguía Velasco se refirió a las cualidades humanas de Guillermo Zúñiga, quien “se distinguió por ser una persona muy trabajadora y solidaria. Inteligencia y esfuerzo lo llevaron a ser quien fue: un excelente ser humano, un buen padre de familia, un buen profesor y un buen político. La sencillez siempre lo acompañó”.
Enrique Mendoza Filidor recordó que Guillermo Zúñiga fue “siempre un caballero”, que “levantó instituciones y creó espacios para la realización del hombre”. Por lo que, citando a otros autores, coincidió en que “jamás podremos decir que haya muerto mientras perdure su obra. Y agradeció los gestos de solidaridad que el amigo tuvo con él en situaciones difíciles.
Por su parte, José Ferrer Rivera comentó las grandes cualidades del hombre, cuya pasión por la educación lo llevó a dar clases “hasta el fin del mundo”, que “ayudando a leer y a escribir a muchos dio sentido a sus vidas”, que “con su sabiduría y audacia infinitas, hizo de la formación académica superior una alternativa de educación pública alejada de toda experiencia conocida”.
Al término del acto, todos los presentes, puestos en pie, ofrecieron a su memoria un prolongado aplauso.
El libro, editado por la Universidad Popular Autónoma de Veracruz (UPAV) en 2016 consta de mil ejemplares de 124 páginas en colores y blanco y negro e incluye fotografías de distintos momentos de la vida del fundador de esta casa de estudios.
