La antorcha olímpica pasó hoy por el campo de refugiados de Eleonas en Atenas, donde un nadador discapacitado sirio asilado en Grecia portó la llama, y después por la Acrópolis antes de terminar mañana su recorrido por Grecia.
Ibrahim al Hussein, de 27 años, que perdió la mitad de la pierna derecha durante un bombardeo en Siria, recorrió con el fuego olímpico el campo de refugiados de Eleonas, donde viven mil 620 personas, principalmente procedentes de Afganistán, rodeado de una multitud de refugiados, cámaras de televisión y periodistas.
“Esto es un gran honor para mi y va dedicado a todo sirio y todo árabe que haya pasado por tantas situaciones difíciles”, dijo a los medios locales después de concluir su recorrido, “mi mensaje para ellos es que no se queden en los campos de refugiados sin hacer nada, sino que vayan tras sus sueños”.
Al Hussein, que vive en Grecia desde 2014, cuando llegó en una balsa neumática a las costas de Samos, comenzó a practicar la natación por influencia de su padre desde joven, hasta que tuvo que dejarlo por el comienzo de la guerra en Siria en 2011.
Ahora Al Hussein, con estatus de refugiado, es miembro del equipo de baloncesto en silla de ruedas de Marussi, barrio del norte de Atenas, y entrena natación tres veces por semana con ALMA, una organización sin ánimo de lucro griega para deportistas discapacitados.
A día de hoy Al Hussein nada los 50 metros libres en 28 segundos, tres segundos menos que su mejor marca personal antes del bombardeo que le dejó sin pierna.
Tras pasar por Eleonas la antorcha continuó su recorrido hasta el centro de Atenas, pasando por la céntrica plaza Syntagma, frente al Parlamento, y desde allí hasta la Acrópolis, donde se realizó un acto frente al Partenón.
La antorcha comenzó su trayecto, tras la ceremonia de encendido en Olimpia, por varios puntos de la geografía griega, en un recorrido que dura seis días y que termina mañana en el estadio Panathinaicó, sede de los Juegos de Atenas de 1896, de los que se cumple el 120 aniversario este año.
La llama visitó primero la isla jónica de Zante para después hacer escala diferentes ciudades y yacimientos arqueológicos en la península del Peloponeso, desde donde fue a Igumenitsa, puerto de la costa occidental del país, y de allí se embarcó hacia la isla de Corfú, tras lo cual recorrió la orilla del lago Ioánina en manos de Yurkas Seitaridis, exjugador de la selección nacional de fútbol griega.
Las últimas ciudades que visitó la antorcha antes de llegar a la capital del país fueron Salónica, la segunda ciudad más importante de Grecia, Kavala y Maratón.
Mañana la antorcha olímpica hará su último recorrido por Grecia, desde donde viajará a Suiza antes de volar hasta Brasil, país anfitrión de los Juegos Olímpicos, que darán comienzo el 5 de agosto con la ceremonia de apertura en el estadio de Maracaná.